El polo biofarmacéutico podrá pedir las exenciones fiscales del Gobierno

El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo trabaja ya en la actualización del Profarma, el programa específico para promover la industria farmacéutica, para favorecer la competitividad del sector farmacéutico. El programa actual concluyó el año pasado, que lleva cuatro décadas en marcha, y desde el Gobierno están desarrollando una estrategia para los próximos cuatro años que parece tener entre sus objetivos reforzar la producción de medicamentos a nivel nacional, después de que la pandemia del coronavirus hiciera patente la importancia y la necesidad de un contar con un polo a nivel nacional.

Estas medidas pueden reforzar las empresas del polo biofarmacéutico de León que actualmente da empleo a más de 1.500 personas y que tiene repartidas sus sedes en varios puntos de la capital leonesa y su alfoz con más de una decena de empresas. Está previsto que el Gobierno apruebe en breve su nuevo plan —el primero se puso en marcha en 2004— para incentivar el sector, uno de los que tiene más peso en la provincia leonesa ya que podrán sumarse al plan las empresas del sector farmacéutico, ubicadas en España, que fabriquen o comercialicen medicamentos de uso humano y que realicen actividades de I+D+i farmacéutica en el territorio nacional.

Entre las medidas que contemplaría el borrador sobre el que trabaja el ministerio que dirige Reyes Maroto, está bonificar con exenciones fiscales a las empresas en función de la categoría en la que se encuentren: aceptables, buenas, muy buenas o excelentes. La nota crecerá en función, por ejemplo, de las inversiones que realice en España, la plantilla con la que cuente o los proyectos que vaya a desarrollar o su inversión en investigación. Así, las exenciones fiscales podrían repercutir directamente en su línea de I+D+i. La evaluación tendrá carácter anual, con diferentes presupuestos para cada uno de los años, según las pasadas convocatorias.

«Para las compañías farmacéuticas es una suerte de auditoría anual hecha por un tercero, que es la Administración, en la que se evalúa su actividad productiva y de investigación, más allá de que las mejor valoradas puedan beneficiarse de deducciones en las aportaciones económicas que hacen cada año al sistema sanitario», explican desde la Asociación Nacional Empresarial de la Industria Farmacéutica establecida en España, Farmaindustria, desde donde añaden que las ediciones anteriores del Profarma aumentaron la valoración de la investigación clínica, terreno en el que se han conseguido grandes avances en los últimos años.

Desde la patronal de empresas farmacéuticas, que valora muy positivamente la trayectoria del programa, señalan que el nuevo plan Profarma «deberá estimular la capacidad de producir en España medicamentos esenciales o estratégicos». En este sentido añade que ya trabajan tanto con el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, como con el de Sanidad para trabajar en esta línea ya que «tendría consecuencias positivas desde el punto de vista sanitario y también desde el económico y social, por el refuerzo del tejido productivo y del empleo que implicaría».

El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo explica que el principal objetivo del programa, a fin de incentivar la industria farmacéutica es aportar un mayor valor añadido, como la inversión en nuevas plantas industriales y en nuevas tecnologías para la producción, y fomentando la investigación, el desarrollo y la innovación.