León abrirá la temporada de esquí el 27 de noviembre sin tope de aforo en pistas

Con el inicio del otoño y a la espera de la nieve, las estaciones de esquí de la provincia cierran su calendario para la nueva temporada, la campaña 2021/2022. Arrancará el último fin de semana de noviembre fiel a unas fechas que convierten a San Isidro y Valle de Laciana-Leitariegos en dos de los espacios blancos del país con la apertura de pistas más temprana. Tras las medidas excepcionales que la pandemia obligó a tomar la pasada temporada, con aforo limitado en los enclaves invernales, venta exclusiva online de los forfaits, cierres periódicos del interior de los establecimientos hosteleros en las estaciones, suspensión de gran parte de la campaña de nieve de colegios e institutos y la imposibilidad de llegada de esquiadores de otras provincias por las restricciones en los desplazamientos —con la cascada de pérdidas para el sector que todo ello provocó—, la Diputación prepara una temporada ya sin topes de aforo.

La decisión de la Junta de poner punto final a la declaración del nivel 1 de emergencia y adoptar la figura del riesgo contenido, las obligaciones quedan prácticamente limitadas a la distancia de seguridad y la mascarilla cuando ésta no pueda garantizarse. De continuar la incidencia del covid a la baja, la campaña de esquí podrá desarrollarse prácticamente en normalidad total. «Es una grandísima noticia no sólo para las estaciones de esquí, también para todas las infraestructuras turísticas de la provincia», señala el diputado de Turismo, Nicanor Sen.

La nueva temporada comenzará, siempre que la nieve llegue a tiempo, el sábado 27 de noviembre y contará con 142 jornadas. Las previsiones iniciales de la institución provincial fijan la conclusión de la campaña 2021/2022 con el fin de la Semana Santa, el domingo 17 de abril, aunque Sen no descarta alargarla siete días más, si la nieve lo permite, para llegar al siguiente fin de semana, coincidiendo con la fiesta de la Comunidad.

«Todo el personal de las estaciones tiene ilusión ante la nueva temporada y la ansiada normalidad para que podamos contar con las mismas condiciones previas a la pandemia». Las restricciones del covid obligaron a fijar topes de aforo en las dos estaciones durante la pasada campaña, el de San Isidro osciló entre los 1.800 y 2.000 usuarios, dependiendo de la superficie esquiable en servicio en cada momento; mientras que en el caso de Valle de Laciana-Leitariegos permitió un máximo de 400 personas en sus pistas.

«En plena pandemia fuimos capaces de abrir los primeros y cerrar la campaña prácticamente los últimos. Optamos por poner nuestras estaciones en servicio, a pesar del momento complicado, conscientes de que para sus zonas de influencia era fundamental para su economía», resalta el diputado de Turismo.

Con la nueva campaña la venta de forfaits podrá realizarse también en taquilla y no sólo exclusivamente online como en la anterior campaña, cuando la Diputación lanzó una nueva plataforma y los fallos iniciales llegar a colapsar el sistema y suscitar decenas de críticas de los usuarios que no podían acceder a la venta.

Las restricciones territoriales impidieron la llegada de miles de esquiadores de otros territorios, principalmente Asturias y Galicia, lo que incidió en la lógica merma de usuarios e ingresos.

Esta temporada, San Isidro estrenará la capota para la cinta de debutantes de Cebolledo (actualmente en fase de instalación), una infraestructura largamente demandada para evitar que los temporales de nieve la entierren con frecuencia y permitir a los usuarios un mayor confort en caso de adversas condiciones meteorológicas. En Valle de Laciana-Leitariegos aguardan, tras conseguir superar el impacto ambiental, el inicio de las obras de su gran plan de modernización y expansión: una inversión de 8,8 millones que la Diputación ejecutará a través de distintos proyectos hasta el año 2023.