Acceso a la vivienda
Los jóvenes de León dedican el 40% del salario a la hipoteca de la casa
El precio medio de la vivienda para las personas de entre 16 y 29 años se sitúa en los 100.400 euros
Algo menos de la mitad del salario es lo que dedican los jóvenes leoneses emancipados a la compra de una vivienda, según se desprende del Observatorio de Emancipación relativo a la segunda mitad de 2020 que el Consejo de la Juventud presentó ayer en Valladolid y en el que ya se atisba una ligera mejoría de la situación económica de la población entre 16 y 29 años tras el impacto de la pandemia. No obstante, la independencia de este colectivo viene lastrada por problemas estructurales, como la temporalidad y la precariedad del empleo.
Entre julio y diciembre del año pasado, el coste medio de una casa se situó en León en los 100.400 euros, un 4,02% menos que en el periodo anterior, apunta el informe. Es la segunda provincia de la Comunidad con los precios más bajos, por detrás de Zamora, donde el valor medio de este tipo de bienes asciende a 97.800 euros, muy por debajo de los 131.760 de Salamanca o los 131.460 de Burgos. En Valladolid pagan de media 129.010 euros.
Por debajo de la media
Los ingresos medios de este colectivo en la provincia ascienden a 1.360,36 euros al mes
Con estas condiciones, un joven de la provincia destina el 40,01% de su sueldo a pagar la hipoteca, un cinco por ciento menos de lo que reservaba durante el primer semestre del año, en el que el escenario era algo más hostil. Solo Palencia registra mejores cifras. En esa provincia, las personas de entre 16 y 29 años necesitan el 38,9% de la nómina para cumplir con los pagos y, si es un hogar, hace falta el 26,9% de los ingresos para la hipoteca. Los expertos aconsejan que no se emplee más de un tercio de las retribuciones al alquiler o a la compra de un inmueble para evitar el sobreendeudamiento. En Salamanca, donde el mercado está muy tensionado, el coste de acceso a la vivienda supone el 57,4% del salario. En Valladolid dedican el 48,7%, casi lo mismo que en Ávila (47,7%), Burgos (46,3%), Soria (46,2)% y Segovia (45%). En Zamora hace falta el 41,9%. Este balance implica que solo el 15,3% de los jóvenes de Castilla y León viva de manera independiente, un dato inferior al que se anotó en el segundo semestre del año anterior (16,9%).
«Se trata de problemas estructurales que se van repitiendo generación tras generación en el colectivo juvenil y que lo deja en una situación muy vulnerable», denunció al respecto la presidenta del consejo autonómico de juventud, Sandra Ámez, durante la presentación del informe. Pidió que no se romantice el hecho de que los jóvenes se vean obligados a permanecer en casa de sus padres durante mucho tiempo.
La tasa de emancipación se encuentra medio punto por debajo de la nacional, tras una «caída sostenida» desde finales de 2017 y con un colectivo que tan solo representa el 12,5% de la población de una comunidad «muy envejecida», pues en 2019 perdió 2.720 jóvenes que emigraron a otras comunidades.
El presidente del CES, Enrique Cabero, destacó del informe el alto nivel de formación de los jóvenes de la comunidad, y señaló que «no puede ser que Castilla y León los forme para que luego realicen actividades que generen riqueza en otras comunidades», por lo que consideró una prioridad fomentar que su proyecto de vida se pueda desarrollar en su entorno.