León, segunda provincia de la región en créditos bancarios

Según el informe emitido por los estudios financieros de Caja España, sobre la evolución de las oficinas bancarias durante el primer semestre del 2002, León es la segunda provincia de Castilla y León en número de créditos concedidos por las oficinas bancarias al sector público y privado y en el volumen de depósitos bancarios. En cuanto a la actividad crediticia de la provincia, supera los 12,5 millones de euros (más de 2.000 millones de pesetas) y se sitúa por detrás de Valladolid, donde los créditos concedidos por las oficinas bancarias alcanzan los 13,7 millones de euros (casi 2.200 millones de pesetas). El volumen de depósitos por oficina se sitúa en León en 17 millones de euros (2.800 millones de pesetas), por delante de Burgos con casi 14,5 millones de euros (2.300 millones de pesetas), pero superada ampliamente por Salamanca, provincia en la que sus oficinas gestionaron, en el primer semestre del año, más de 19 millones de euros (3.100 millones de pesetas) en depósitos bancarios. Este incremento de los depósitos en la provincia salmantina está motivado, principalmente, por el trasvase de fondos de la provincia de Madrid que hubo en el ejercicio pasado, lo que supone que supere la media de la comunidad autónoma. Índice de bancarización En lo que se refiere al índice de bancarización, según el informe de la Caja, apenas se aprecian grandes cambios desde diciembre del 2001. En Castilla y León, la provincia con más oficinas bancarias por habitante es Soria, con 17,1 entidades por cada 10.000 habitantes, lo que supone el doble de la media nacional. Por lo que respecta a León, el índice de bancarización es de 13,2 oficinas bancarias por cada 10.000 habitantes. En el resto de la comunidad autónoma no ha habido ningún cambio con respecto a los datos de diciembre del año pasado. Por lo que se refiere a la evolución del número de oficinas en el sistema bancaria en este primer semestre del año, cabe destacar que los bancos han reducido su presencia en todas las comunidades autónomas, cerrando un número importante de oficinas, mientras que las cajas de ahorros y las cooperativas de créditos tuvieron una política clara de expansión. Por lo que respecta a León no se ha producido variación alguna.