El contador del fotorrojo de Doctor Fleming, invisible

No es la primera vez que ocurre. Primero fue en el paseo de La Condesa, donde el Ayuntamiento se vio obligado a rectificar la colocación del contador, y ahora sigue ocurriendo exactamente la mismo con el fotorrojo ubicado en la avenida Doctor Fleming: que no se ve. Se da la circunstancia de que es obligatorio que este tipo de dispositivos tengan un contador visible colocado en el semáforo que vigila el radar, para que el conductor, aun siguiendo la normativa de velocidad, tenga tiempo de frenar cuando salte la luz ámbar. Y esa razón es motivo suficiente, según fuentes consultadas, para recurrir cualquier multa que proceda de este aparato puesto que no cumple las exigencias mínimas establecidas para poder multar en base a la nula visibilidad de la señal que advierte del tiempo para pasar. Los árboles alineados en la acera impiden ver el contador que se sitúa a baja altura, al nivel del semáforo ideado para peatones. Ayer mismo, como se muestra en la imagen adjunta, la situación era la que se arrastra desde hace semanas y el visor no está al alcance de la vista de un conductor que circule a la velocidad adecuada. Abogados expertos en la materia aconsejan recurrir las multas de este fotorrojo por las razones expuestas.