Urbanismo
La Ronda Interior sentencia a Fernando I y Alfonso el Justiciero
Casi 40 años después de que se ideara y 24 desde la declaración del expropiatorio, el derribo de las diez primeras casas avanza la desaparición de la manzana por encima de la que construirá el vial
A la manzana de Alfonso el Justiciero y Fernando I la dieron por muerta ya en 1982 . Aquel Plan General de Ordenación Urbana, que motivó el procedimiento expropiatorio abierto en 1997, alumbró la Ronda Interior sobre los planos y fijó la piqueta para sepultar con el concepto de «fuera de ordenación» a los edificios que repartían portales a ambas calles. La calificación implicaba que no había licencias de obra más allá de aquellos trabajos de adecentamiento puntual para que no se cayeran abajo. Nada más se podía hacer.
No había otro horizonte para ese aparte de la ciudad que poco a poco se vació y consumió en su propia degradación, prolongada por los incumplimientos sucesivos del proyecto para el que nunca había dinero disponible, más allá de tres expropiaciones sueltas cuyo espacio se convirtió en un aparcamiento en precario. Con el tiempo se generó un limbo que mañana a primera hora, casi 40 años después, verá cómo la sentencia empieza a ejecutarse con el derribo de los diez primeros inmuebles.
Las máquinas echarán abajo las casas que van desde el número 13 hasta el 22 de Fernando I, con sus correspondiente edificios pareados que dan fachada hacia Alfonso el Justiciero y que terminan en la intersección con la calle La Palomera. El avance, gracias a que el expropiatorio culminó el pasado verano, desgajará la mitad de la manzana. La otra parte queda a la espera de que en la segunda fase, aún con las expropiaciones pendientes de asentar, se complete la demolición completa del entramado de inmuebles en el que se cuenta otra veintena de inmuebles, en los que se anotan más de un treintena de vecinos con posibilidad de realojo frente a los dos que se anotaban con derecho en la primera fase.
La consecución del plan, que reserva para comienzos de 2023 el estreno de la Ronda Interior y la consecuente peatonalización del entorno de la muralla , acabará con una deuda. La manzana de Alfonso el Justiciero y Fernando I será historia .