Recobrar el agua que vierte la variante de Pajares costaría de 30 a 50 millones
El plazo de alegaciones para las diferentes administraciones finalizará el día 31 de enero
Edificar una estación de bombero para recuperar los 319 litros de agua por segundo que la variante de Pajares vierte en la actualidad por las obras ferroviarias, costaría entre 30 y 50 millones de euros, según desveló ayer Carlos González-Antón, secretario de la Federación Leonesa de Entidades Locales Menores, que asume que es la única solución para evitar que Asturias se quede con ese caudal, que pertenece a León.
Junto al presidente de la Asociacion de Colegios Profesionales de León (Colprole), José Antonio Cuba, Antón informó ayer en rueda de prensa de las últimas novedades. Una de las más interesantes radica en que el plazo para que las administraciones se pronuncien sobre su responsabilidad en la obra finaliza el próximo día 31 de enero.
«El Ministerio de Transición Ecológica había abierto un plazo para la presentación de alegaciones para la modificación de la declaración del impacto ambiental», explicó Cuba. «Es un momento clave para reclamar la compensación de los daños», aseguró.
Deben proponer «soluciones adecuadas para el trasvase de aguas» y aclarar si va a haber compensaciones», exigió González-Antón. «Estamos hablando de una zona con una despoblación brutal, por debajo de los 7,5 habitantes por kilómetro cuadrado. Será un buen momento para ver cómo se retratan todas estas administraciones», dijo Antón. «No nos oponemos a las obras de carácter nacional, pero si a que los ciudadanos paguen los daños».
«Hay un caudal de 319 litros por segundo que se está perdiendo, y es totalmente urgente la creación de una estación de bombeo. Asturias ya ha pedido hacerse con todo ese caudal y en León no nos hemos pronunciado. Hay diferentes alternativas y las administraciones tienen que pronunciarse antes de final de enero sobre su futuro. Hay varias alternativas, y tienen un coste que va de los 30 a los 50 millones de euros», explicó.
4.000 MILLONES
«El proyecto de la Variante tiene un coste de casi 4000 millones. Desde Rodiezmo están trasladando el agua a Millaró, Pero son soluciones provisionales. Necesitamos acciones definitivas», dijo.
«El Plan Hidrológico Nacional no tiene ni siquiera en cuenta estos detalles, van a los grandes números nacionales. No contempla lo que ocurre en Villamanín, en Pola de Gordon y de ahí para abajo todo lo demás», insistió Antón.
«Si no se modifica la declaración de impacto ambiental, acudiremos a los tribunales», advirtió. «Hay un déficit esencial de agua, que influye en el desarrollo de todo tipo de actividades económicas. Los ganaderos y los agricultores todavía no han solicitado la compensación por las pérdidas ocasionadas. En Paradilla, la Diputación ha tenido que realizar inversiones importantes para hacer frente a la situación que se les plantea. ¿Quién se lo compensa ahora?».