León revisará 12.000 edificios para evitar que se derrumben

Los derrumbes relativamente frecuentes de inmuebles en la zona antigua de la ciudad en los últimos años han obligado al Ayuntamiento a ponerse manos a la obra para trabajar en la elaboración de una ordenanza -en el ámbito del nuevo PGOU- que fije la obligatoriedad de la inspección técnica de los inmuebles que superen los 45 años. En este caso se encuentran actualmente en la capital más del 21% de los cerca de 65.000 hogares, lo que establece en alrededor de 12.000 las residencias que deben pasar un control una vez que la ordenanza se ponga en marcha el próximo año. El concejal de Urbanismo explicó ayer que los técnicos de su área ya están examinando ordenanzas de estas características en funcionamiento en otras ciudades. Principalmente, analizan la que aprobó hace años el Ayuntamiento de Madrid y que establece la inspección técnica de las viviendas a partir de los 45 años de vida. Se trata de garantizar que los propietarios cumplen con su obligación de mantener su vivienda y evitar nuevos derrumbamientos, en muchos casos, prácticamente «buscados» por los dueños. A través de esta inspección, deberá presentarse un certificado homologado que será obligatorio, como en el caso de la ITV para los vehículos. El Ayuntamiento establecerá convenios con empresas para que éstas realicen las inspecciones con garantías. Los gastos de estos controles correrán a cargo de los propietarios. De esta manera, los dueños podrán acreditar el estado del edificio y descartar cualquier tipo de riesgo de desplome. Las revisiones deberán ser periódicas de acuerdo en cada caso a la edad de los inmuebles. El mayor porcentaje de las viviendas de la ciudad, el 38%, se sitúa en la franja de edad entre los 20 y 50 años. Además, el 4% supera los 70 años.