Primer destino, Boiro

José Antonio Fernández Demaría, coronel director de la Academia Básica del Aire de La Virgen del Camino, encabezó su discurso a los alumnos que acababan de jurar bandera por las condiciones en las que se encontraban ante «la situación de emergencia nacional, que en el caso concreto de esta unidad supone la incorporación a las tareas de vigilancia y limpieza» que les han sido encomendadas en Galicia. Las once damas y los 134 caballeros juraron ayer bandera en uno de los hangares de la academia después de una misa oficiada por el obispo de León, Julián López, en el que en su homilía también recordó la situación que se está viviendo en las costas de Galicia, lo que el obispo valoró como «el desastre del Prestige». Desde 1927 la aviación española está hermandada bajo la Virgen de Loreto y tradicionalmente el día de esta festividad los alumnos de la academia leonesa juran bandera. Este año, diez pasan a ser soldados de Seguridad, defensa y apoyo y 24 de mando y control, del cuerpo general. Los 111 restantes pasarán al cuerpo de especialistas, entre los que destacan los 32 mecánicos de aeronaves. Después de besar la bandera los soldados desfilaron en filas de tres y pasaron bajo ella. Posteriormente, el coronel director de la Academia dedicó unas palabras a estos alumnos en las que les comunicó que la «lealtad y la disciplina» serán sus mejores aliados para cumplir su compromiso, aunque la disciplina la deben practicar «pero nunca como una expresión de negación de la personalidad». Un corbatín para la bandera La Casa de León en Madrid ofreció un corbatín para la bandera de la Base Aérea, que a partir de ahora ondeará con el resto de las condecoraciones y galardones de los que se ha hecho merecedora la academia de La Virgen del Camino. Fernández Demaría consideró esta entrega como uno de los actos que demuestran la unión de la base con «la sociedad más próxima, la leonesa». Entre las autoridades civiles que asistieron a la jura de bandera de la decimosegunda promoción se encontraban el alcalde de Valverde de la Virgen Antolín Fandiño, el alcalde de León, Mario Amilivia y el alcalde de San Andrés del Rabanedo, Miguel Martínez, y el presidente de la Casa de León en Madrid, José Rafael Álvarez de la Puente. Entre las militares, el general segundo del Macen, Agustín Álvarez y el resto los mandos de las instituciones militares que hay en León y su provincia. Como estaba previsto que los alumnos partieran inmediatamente hacia Galicia después de la jura de bandera, el resto de los actos dedicados a la celebración de la Virgen de Loreto quedaron suspendidos y sólo se celebraron los actos militares, entre ellos, el homenaje a los caídos.