Los jóvenes y las rentas más bajas, cada vez más alejados de las posibilidades de compra
La situación del ahorro y las condiciones de financiación, junto con la previsión de un período de estabilidad en el crecimiento económico, han contribuido a dibujar el nuevo escenario de crecimiento del sector inmobiliario. Especialmente atractivo para los inversores. Las ventas se mueven especialmente, según los analistas, por la demanda de reposición, y la demanda solvente que adelanta la decisión de compra en estas circunstancias favorables. Y que busca una rentabilidad a través del creciente mercado del alquiler con un activo que además se revaloriza, y que previsiblemente seguirá creciendo en los próximos meses.
Una situación que no afecta a toda la sociedad por igual, de hecho el perfil del comprador de vivienda está cambiando. Según un informe del Fondo Monetario Internacional, si se relaciona el incremento de los precios de la vivienda con el crecimiento de los ingresos de las familias el resultado es que este bien es poco asequible para muchos segmentos de la población.
El Banco de España corrobora este cambio en el perfil de los compradores que alimentan este incremento de los precios: ahora son personas de más edad, con una posición socioeconómica más elevada. La realidad es que el covid ha alejado de la compra a los más jóvenes y a las rentas más bajas, aquellos que quieren acceder a la primera vivienda.
El incremento de precios y la escalada de la inflación en los últimos meses están también tensionando los precios del alquiler, lo que suma nuevas dificultades para este colectivo con menos facilidades de acceso a la vivienda.
En las ciudades más grandes, donde más están aumentando los precios, esta espiral se alimenta también porque la capacidad de producción del sector no camina pareja a la formación de nuevos hogares que demandan una solución habitacional. Tampoco es el caso de León. Según la última Encuesta de Hogares del INE, el número de familias en la provincia se reduce: hay 3.400 menos en seis años. El abandono de los jóvenes en busca de oportunidades laborales deja su huella en este dato.
Por otro lado, a la subida de los precios contribuyen también las dificultades del sector de la construcción. El incremento del precio de los materiales y la denunciada falta de mano de obra retraen las inversiones en obra nueva, lo que a su vez tira al alza de los precios en este segmento inmobilario.