León elimina el amianto de la cubierta del pabellón del CHF
Las obras servirán para corregir el deterioro de la estructura y salen a licitación por 224.200 €
Las placas de fibrocemento del CHF se cambiarán por el riesgo para la salud que generan, según la ley de 2001 contra el amianto. MARCIANO PÉREZ
Cuando se concibió, en el año 1959, no existía la alarma que se generó después y que, a partir de 2001, hizo que se prohibiera por ley. Ahora, 20 años después, a partir de una de las condiciones marcadas por la UPL para apoyar los presupuestos municipales, el Ayuntamiento de León encarga el proyecto para «eliminar el riesgo para las personas de la exposición a las fibras de amianto que se encuentran en las placas de fibrocemento que compone la cubierta» del pabellón polideportivo del Colegio de Huérfanos Ferroviarios (CHF).
La intervención servirá además para «corregir el deterioro» de la estructura, como se cita en el pliego de condiciones del concurso para encontrar una empresa que ejecute las obras, licitadas a partir de un presupuesto base de 224.200 euros.
El proyecto se centrará en «la sustitución de la cubierta existente». Para hacerlo, se retirará «la chapa de fibrocemento» actual y se cambiará por «un faldón de cubierta de paneles sándwich con relleno aislante de espuma de poliuretano», según se cita en el documento de la obra, en el que se incide en que se colocarán «tramos en policarbonato translúcido para dar iluminación al interior». No se modificará la estructura, como se avisa. Pero sí que se saneará la fachada, se «actuará sobre el revestimiento del frente y vuelo de cubierta», se eliminarán «los revestimientos que presenten grietas o fisuras, o cualquier otra lesión, y se aplicará un nuevo revestimiento armado con malla de fibra de vidrio».
Como remate, según se especifica, «se llevarán a cabo los trabajos de albañilería necesarios para la adecuación de las instalaciones existentes». La intervención se justifica no sólo en «la necesidad de eliminar el riesgo inherente al fibrocemento», sino en que «la cubierta sobre las pistas presenta deficiencias de conservación». Esta suma de desperfectos se acumulan en el pabellón, que fue construido en 1959 y tuvo algunas reformas en 1988. Pero sobre todo, como se recalca en el informe, la actuación atiende a «la alarma existente entre el personal del complejo y los usuarios», que han hecho que, en lugar de optar por obras intermedias de «encapsulamiento», se opte por resolver de manera definitiva el problema con la retirada del amianto de la cubierta del pabellón.