El transporte mantiene el pulso por tercera semana

El transporte de mercancías no arrancará tampoco este lunes. El pulso abierto continuará por tercera semana. El órdago de los transportistas extiende la amenaza del desabastecimiento que esta última semana ya ha marcado los lineales de muchos supermercados, en los que de todos se mantiene el servicio, y que ha obligado a algunas empresas a cerrar su producción por falta de materias primas para la transformación, como le sucede a Legumbres Luengo. Pero sobre todo, que condiciona un sector que mantiene colgadas del volante los ingresos de más de 3.000 profesionales en la provincia leonesa, que han visto cómo en apenas unos meses el precio de los carburantes se incrementaba hasta en un 80% y amenazaba su estabilidad.

En ese empeño, la asamblea de la Asociación de Transportistas del Bierzo, Valdeorras, Astorga y La Bañeza decidió este domingo en una votación mantener el paro patronal pese a los acuerdos en Madrid con el Gobierno. La votación ofreció un resultado de 53 votos a favor dentro de los 83 transportistas y pequeñas empresas con derecho a voto. Aunque se alcanzó un acuerdo sobre la subvención a los combustibles, los transportistas agrupados en esta asociación, una de las más representativas del sector en la provincia, entienden que los problemas van más allá y es el momento de poner sobre la mesa otras reivindicaciones como los costes «desorbitados», sólo el gasóleo supone entre el 47 y el 52% del viaje, a lo que se suman otros costes.

Según el presidente de la asociación, Antonio García Regueiro, los transportistas del Bierzo van a apoyar a la plataforma nacional que inició el paro patronal a la espera de que se pongan sobre la mesa esos otros problemas del sector. Entre las soluciones estaría agilizar la Ley de la Cadena Logística que fijaría unos precios pero cuya negociación ha quedado sólo en ser presentada al sector antes del 31 de julio. «La situación es desesperada porque también tiene consecuencias en otros sectores, pero no nos queda otra porque muchos compañeros están ya al borde del cierre», apuntó.