Sanidad
Los centros de salud recuperan la cirugía menor tras dos años de parón
Las pequeñas operaciones aligeran las listas del Hospital, ahorran costes y acercan la sanidad al usuario
Lunares, uñas encarnadas, quistes sebáceos, abscesos epidérmicos y drenajes del sinus pilonidal vuelven a formar parte de las tareas de los centros de salud leoneses tras dos años de parón.
El pasado mes de febrero ambulatorios como el de Trobajo del Camino , que tiene asignadas 20.901 cartillas de esa localidad, el barrio de La Sal, La Virgen del Camino y Valverde de la Virgen, reiniciaron estas pequeñas intervenciones que acercan la sanidad a los ciudadanos , aligeran las listas de espera del Hospital y ahorran costes.
La coordinadora de Enfermería de ese centro, Begoña Castrillo, reconoce que estas operaciones suspendidas durante la pandemia, como permiten extirpar lipomas, nebus, fibromas cutáneos y hasta corregir las orejas rasgadas, «son muy agradecidas por los pacientes y evitan muchísimas consultas a Dermatología y Cirugía Menor del Complejo Asistencial Universitario de León».
También destaca «el gran servicio y atención que se facilita a los pacientes», ya que al tratarse de procesos no malignos si acudieran al Hospital sus intervenciones se demorarían sustancialmente frente a intervenciones prioritarias.
De momento, las cirugías menores ambulatorias , que disponen de una sala-quirófano especial con camilla, lámpara adaptada e instrumental, se están citando un día a la semana y en breve se ampliará a dos al tener que compatibilizarse con las consultas diarias y las guardias.
Para realizarse, el paciente tiene que firmar un consentimiento informado y si su lesión fuera susceptible de dudas se envía una muestra patológica a analizar. Los casos que llegan a operarse en los centros de salud se detectan y valoran en la consulta de primaria, desde donde se genera la derivación, se citan y se incluyen en las agendas. Todo se registra en el sistema Medora y en la historia clínica del paciente, al igual que las pruebas que se practiquen. El seguimiento de las lesiones y las curas se dejan en manos de las enfermeras de cada usuario.
La mayor parte de las cirugías para eliminar verrugas y lunares se realizan con electrodisección gracias a los bisturís eléctricos; con frío (crioterapia) o desecación. No requieren anestesia general, pero algunas sí local. La cirugía menor se encuentra dentro de la cartera de servicios de Primaria, al igual que Fisioterapia y las ecografías, y refuerza el papel de Atención Primaria dentro del Sistema Nacional de Salud.