León abre la nueva era del ahorro energético entre la incertidumbre de pymes y autónomos

Incertidumbre, caos, falta de consenso con los afectados,... Y muchas dudas. Sobre lo que hay que hacer y sobre la eficacia del esfuerzo que se exige. Tantas dudas como indignación, porque el sector empresarial leonés cree que se carga de nuevo sobre las pymes y los autónomos (ya muy debilitados por la sucesión de crisis y tropiezos) el peso económico de una labor que consideran destinada más a la concienciación que al ahorro energético. El plan de ahorro aprobado por el Gobierno a través de un real decreto de medidas urgentes entra en vigor en pleno verano, con medidas escaladas y más incertidumbres que certezas. El empresariado leonés muestra su disgusto pero acatará la medid;, las administraciones y servicios públicos hacen lo propio, los adeptos al Gobierno adelantándose a la obligatoriedad y los contrarios a regañadientes. Todos confían en que la amenaza de las millonarias sanciones fijadas en la norma sea flexible. Independientemente de quién vigile el cumplimiento.

En este escenario entró en vigor la pasada medianoche la primera fase del plan de medidas de ahorro y eficiencia energética. «Son medidas urgentes pero entran en vigor escalonadamente, y se aprueban en pleno agosto. Eso genera desconcierto», señala desde la Federación Leonesa de Empresarios (Fele) su secretario general adjunto, Enrique Suárez. «Temperaturas y luces desde hoy, carteles a partir del 2 de septiembre, puertas cerradas a partir del 30 de septiembre,... Las consultas en los últimos días han sido constantes».

La patronal lamenta que la norma esté «llena de contradicciones, por ejemplo con la legislación laboral». Pero incide en que «afecta sobre todo a pequeños empresarios y autónomos, que están desamparados. Muchos no saben qué hacer. Si los carteles deben informar en tiempo real, si las estaciones de servicio tienen que apagar sus escaparates, porque están en zonas apartadas y crea inseguridad,..». En resumen, «una falta de confianza que va en contra de la actividad económica, que es lesiva para la estabilidad y la creación de empleo y que viene a machacar aún más a un pequeño empresariado ya muy debilitado con todo lo que ha pasado, y que se enfrenta a la amenaza de desaceleración en el tercer trimestre del año. Es otro coste y otro tropiezo más que pone en peligro la inversión y la creación de empleo», critican desde la Fele.

El Círculo Empresarial Leonés (CEL) califica de «absurdas y cosméticas» las medidas aprobadas. Consideran el decreto «intervencionista», y que no tiene en cuenta la situación de los distintos sectores. Su presidente, Julio Álvarez, adelanta que las decisiones «afectarán negativamente al consumo y al turismo, en un momento de señales de frenazo en la actividad económica y en el empleo. Otra vez se le da un nuevo palo a la hostelería y al comercio». Además «será muy difícil de vigilar y controlar y no sabemos muy bien quién tendrá que hacerlo».

El comercio

El comercio es uno de los sectores más afectados por las medidas urgentes. Desde la Asociación Leonesa de Comercio su presidente, Javier Menéndez, recuerda que el sector «hace tiempo que se adapta al ahorro energético. Por concienciación, y porque las cuentas de las empresas lo exigen». Sobre las nuevas exigencias reconoce que «el papel lo aguanta todo», pero se pregunta por la cuestión sanitaria. «Llevamos dos años pasando frío en el comercio porque había que tener todo abierto, y ahora hay que cerrarlo todo. ¿Ha desaparecido la pandemia?».

Respecto al horario de apagado de las luces de los escaparates recuerda que en países vecinos se ha retrasado hasta las 00.00 horas. «Aquí es a las 22.000. Desde luego cuando los días sean más cortos el panorama de una ciudad que tiene una iluminación municipal cuestionable será cuando menos triste. Lamentablemente, eso hará las ciudades también más inseguras».

Por su parte todos los centros educativos, igual que los sanitarios, quedan fuera de los edificios que tendrán que someterse al plan de ahorro de energético. Está por ver qué medidas se llevan a cabo tanto en las guarderías, como colegios e institutos, además de en la Universidad, a nivel autonómico ya que en principio quedan fuera del real decreto del Gobierno. En el caso de que Castilla y León decida realizar algún tipo de medida en los centros educativos se llevarán a cabo ya en el próximo curso, porque estos edificios permanecen ahora cerrados por la vacaciones estivales. A principios de septiembre, cuando se incorporen los docentes para preparar el curso se hará patente si se lleva a cabo alguna medida para reforzar el ahorro energético.

El Ministerio de Defensa ya lleva aplicando «desde hace tiempo» medidas de ahorro energético en las instalaciones que dependen directamente de él y que en la provincia de León afectaría a las tres bases militares -Conde de Gazola y Santocildes, ambas del Ejército de Tierra, y la Academia Básica del Aire-, además de a otros edificios como la subdelegación de Defensa o el acuartelamiento de San Marcelo. Desde la Academia del Aire concretaron ayer que estos centros ya cumplen con los requisitos que ahora plantea el Gobierno para el resto de los edificios a fin de reducir favorablemente el gasto de energía.

Los edificios municipales cumplirán el decreto «en tiempo y forma y los edificios que se quedarán iluminados son aquellos que tienen un carácter monumental como son la Catedral, San Isidoro y San Marcelo. El resto de edificios municipales se mantendrán iluminados exclusivamente si están en uso», explicaron fuentes del Ayuntamiento de León a este periódico. Como ejemplo de esto último se cita el Auditorio Ciudad de León.

El Palacio de los Guzmanes, sede de la Diputación Provincial podría tener la doble consideración de edificio público y monumento, en virtud de sus características. En principio se aplicará el criterio de utilidad pública y regirá la norma primera, por lo que a partir de las 22.00 horas se apagará la iluminación y en el interior se ajustará la temperatura a las exigencias. En lo referente a las instalaciones judiciales, la Audiencia Provincial no tendrá que regular la temperatura porque no dispone de sistemas de refrigeración y en lo tocante a los juzgados de la capital, el decano Pablo Arraiza aseguró ayer que se ajustará la temperatura a los parámetros establecidos. «El mantenimiento de los edificios judiciales es competencia de la Gerencia de Justicia. No obstante, el edificio cumple ya con los requerimientos de la norma, y únicamente deberá ajustarse la temperatura».

En lo tocante a los cuarteles de la Policía Local, la Guardia Civil y las Comisarías de la Policía Nacional, la instrucción es la misma y la dicta la lógica: se restringirán los usos de iluminación a las restricciones que impone el Real Decreto y lo mismo se hará en cuestiones de temperatura.

Información elaborada por: María J. Muñiz, Miguel Ángel Zamora, Abigail Calvo