La Junta consagra a Caléndula en el podio del cálculo con 15 M€
El Consejo de Gobierno aprueba la gran inversión para el supercomputador de Vegazana
Espacio tecnológico donde está asentado el superordenador Caléndula. RAMIRO
La aportación dineraria que aprobó el Consejo de Gobierno para la Fundación Supercomputación Castilla y León (Scayle), derivada de los Fondos Europeos REACT-UE, también servirá para ampliar el ancho de banda de la Red de Ciencia y Tecnología de Castilla y León (RedCayle) que proporciona servicios de conectividad a las universidades, centros de investigación y centros educativos de la autonomía, y consagra al proyecto Caléndula como uno d elos tres grandes supercomputadores de España.
La Junta invertirá 15,04 millones de euros, durante el presente ejercicio y el próximo, para multiplicar por veinte la capacidad de cálculo y almacenamiento de datos del supercomputador ‘Caléndula que se aseinta en terrenos del campus de la Universidad de León.
Esta aportación dineraria que ha aprobado ayer el consejo de Gobierno para la Fundación Supercomputación Castilla y León (Scayle) y que proviene de los Fondos Europeos REACT-UE, también servirá para ampliar el ancho de banda de la Red de Ciencia y Tecnología de Castilla y León (RedCayle) que proporciona servicios de conectividad a las universidades, centros de investigación y centros educativos de la autonomía.
Más en concreto, gracias a esta actualización y mejora de los equipamientos e infraestructuras de alta tecnología del Centro de Supercomputación ubicado en el Crai-TIC que la Universidad de León tiene en el Campus de Vegazana, la capacidad de cálculo del supercomputador Caléndula pasará de los 0,5 a los 10 PetaFLOPs, la capacidad bruta para almacenamiento de datos de 1 a 20 PetaBytes y la memoria RAM para la ejecución de servidores virtuales de 16 a 128 TeraBytes de memoria RAM. Ello supone multiplicar por veinte la capacidad de procesamiento y almacenamiento de Caléndula.
El proyecto también comprende la adquisición e instalación de los equipos de seguridad perimetral y prevención de intrusiones a las plataformas, y el incremento de la capacidad de transmisión de datos de RedCayle mediante la renovación de los equipos de fibra óptica, la instalación de nuevos servidores, la mejora de los sistemas de refrigeración eléctrica y la implementación de una plataforma unificada para la monitorización de la red.
Cabe recordar que esta inversión se incluye en los objetivos de la Agenda Digital para Castilla y León, que forma parte de la Estrategia de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente (RIS3) de Castilla y León 2021-2027 aprobada por la Junta de Castilla y León el 23 de septiembre de 2021.
Scayle es una fundación sin ánimo de lucro constituida por la Junta de Castilla y León y la Universidad de León en enero de 2008 y que, entre sus fines, tiene la promoción de acciones de innovación en el mundo de la Sociedad del Conocimiento, proporcionando un entorno de trabajo excelente en el área del cálculo intensivo, las comunicaciones y los servicios avanzados, contribuyendo mediante el perfeccionamiento tecnológico al desarrollo económico de la Comunidad y a la mejora de la competitividad de las empresas.
78 millones de horas
Entre los proyectos asignados a Caléndula hay investigaciones vinculadas a nuevas técnicas de radioterapia, cálculo sobre tectónica de placas, nuevos materiales o el análisis de datos provenientes de diferentes instrumentos de observación del universo. Esas 78 millones de horas dedicadas por el Centro de Supercomputación de León están repartidas entre más de 80 grupos de investigación de múltiples centros y organismos de investigación a nivel nacional.
La Red Española de Supercomputación está interconecta 14 instituciones y 17 superordenadores distribuidos por todo el territorio nacional, que colaboran para proporcionar los recursos de cálculo a diferentes proyectos. A estos grandes recursos pueden acceder los grupos de excelencia de España, de cualquier universidad o centro que cuenten con este aval, y desde el centro de supercomputación de Barcelona, que coordina la red, se les asignan los diferentes «nodos» o supercomputadores a los que tienen que enviar sus datos para trabajar. Cada cuatrimestre se van cambiando o renovando los proyectos.
El Centro de Supercomputación de León continúa aumentando su capacidad y sus trabajos de cálculo y el año pasado realizó más de 24 millones de horas a las que hay que sumar las de cálculo en GPU, en gráfico. Todo ello supone un incremento del uso de los recursos.