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Los hoteles cierran un verano por debajo de las expectativas

Septiembre retoma el pulso de la ocupación al sumar el turismo de negocios al vacacional

Tras un julio menos dinámico la ocupación hotelera en León se acercó en agosto a los niveles previos a la pandemia. BRUQUE

León

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El sector hotelero leonés ya había adelantado que el verano turístico que se anunciaba como el de la gran recuperación no iba a ser tan boyante como se presumía a nivel nacional. Los datos de julio y agosto ratifican que no ha sido un verano de afluencia masiva a León, aunque las cifras de ocupación hotelera son similares a las anteriores a la pandemia. En el caso de agosto, sin embargo, peores que las del año pasado, con las restricciones que había. Septiembre está teniendo un mejor comportamiento, coincide el sector.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó ayer las cifras de coyuntura turística hotelera con datos de agosto. El mes pasado trajo a los hoteles leoneses 104.368 visitantes, eso son casi 2.000 menos que en el mismo mes del año anterior. Julio sí superó con creces la afluencia de 2021. Ambos meses se situaron en datos de 2019, antes de que el coronavirus quebrara la movilidad.

En el cómputo de los ocho primeros meses del año los hoteles de la provincia (que son casi una decena menos que en los años anteriores, 51 en total) recibieron a 532.366 turistas, lo que supone 4.000 menos que en el mismo período del año anterior a la pandemia. En 2020 y 2021 las restricciones y las olas de covid dejaron las cifras de visitantes en menos de 300.000 el año pasado y poco más de 187.000 en 2020, entre enero y agosto.

«El verano comenzó con una primera quincena de julio muy parada, nos hizo pensar que la temporada no iba a ser buena, las familias ya estaban preocupadas por los precios y la situación económica», explica Manuel García, presidente de la Unión Hotelera de León. Sin embargo «a partir de la segunda quincena la actividad se recuperó, y agosto ha sido relativamente bueno, al menos para los hoteles de cuatro y tres estrellas». Con todo, los niveles de ocupación están alrededor de un 10% por debajo que antes de la pandemia. «También hemos tenido que subir un poco los precios, por el incremento de los gastos; aún así los beneficios se resienten de este encarecimiento».

Desde el Círculo Empresarial Leonés (CEL) reconocen que «el verano ha sido peor que el anterior, con un descenso medio de ocupación del 6% en agosto y del 12% en julio. Es verdad que agosto de 2021 fue extraordinario para la ocupación hotelera, entre otras cosas porque los precios fueron más asequibles que este año». La organización empresarial lamenta que el verano «no haya cumplido las expectativas, y la ocupación media ha quedado por debajo del 80%». Coincide con la Unión Hotelera en que los precios de las habitaciones han subido, pero «la rentabilidad media de los establecimientos ha bajado por la escalada de precios de las materias primas y el aumento de costes».

Septiembre está siendo «un buen mes, porque se retoma también la actividad del cliente de negocios», explica Manuel García.

Los próximos meses están marcados por la incertidumbre. El sector teme sobre todo el bajón de noviembre y diciembre. «De momento no veo lo que se vaticina, parece que la actividad de empresa se reactiva», concluye.