Detenido por retener a su novia en casa tras trasladarla a la fuerza en el maletero
El presunto agresor, vecino de Villaquilambre de 33 años, posee antecedentes por violencia de género
La actuación de policías y guardias ayudó a resolver la situación. DL
Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría Provincial de León junto con la Guardia Civil lograron detener el pasado martes a un vecino de la localidad de Villaquilambre, de 33 años de edad y con antecedentes por violencia de género, por un presunto delito de lesiones y violencia de género contra su novia y por detención ilegal, según confirma la Subdelegación del Gobierno en León.
El supuesto agresor inició una discusión con su pareja en la calle San Guillermo de León y, aunque ella intentó zafarse e irse en reiteradas ocasiones, según las mismas fuentes, para abandonar el lugar, él se lo impidió «sujetándola fuertemente» e incluso llegó a golpearla en la cara en varias ocasiones y la arrastró hasta la altura donde tenía estacionado el vehículo.
Una vez allí la introdujo «por la fuerza en el maletero arrebatándola el teléfono móvil para impedir que pudiera pedir ayuda». El hombre condujo después «a toda velocidad» hasta su domicilio donde sacó también a la fuerza a la mujer del vehículo y la obligó a cambiarse de la ropa porque la tenía manchada de sangre, ya que durante el trayecto sufrió más lesiones al golpearse en el habitáculo, destacan las fuerzas del orden. La víctima consiguió en un momento dado huir del domicilio y refugiarse en una gasolinera cercana, donde fue auxiliada por el empleado de la instalación, quien dio aviso a la Policía y a la Guardia Civil. Efectivos de la Policía Local de Villaquilambre la trasladaron al Hospital de León para ser asistida por las lesiones que presentaba.
«En todo momento la coordinación entre las distintas Fuerzas de Seguridad ha sido clave para facilitar a la víctima un tratamiento adecuado a la situación emocional que presentaba, agravada por las lesiones físicas», matiza la Subdelegación. La joven permanecióen todo momento acompañada, primero por la Guardia Civil y la policía local y ya en el Hospital por policías de la UFAM de la Comisaría Provincial de León, los cuales se encargaron de instruir el correspondiente atestado policial.
Tras conocer los hechos, el domicilio del agresor estuvo continuamente vigilado por miembros de la Guardia Civil donde se había atrincherado el supuesto agresor y tras arduas gestiones el hombre depuso su actitud y se entregó sin oponer resistencia a la detención. El detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 4 y de Violencia sobre la mujer, que decretó su ingreso en prisión.