TRIBUNALES
La reanudación del juicio por la Púnica sostiene tintes de inocencia de Barazón
Del Egido niega presiones del presidente y otro testigo rechaza haber mediado ante Cospedal
La reanudación del juicio por la pieza leonesa de la Operación Púnica aportó dos testimonios que defienden la inocencia del expresidente de la Diputación en la causa abierta contra él. Michel del Egido diputado de Turismo en la época de los hechos, negó haber recibido presiones para incurrir en ilegalidades a la hora de licitar el contrato de una cafetería de San Isidro y Donato Sánchez, directivo de la banca Societé Generale al que se atribuía el papel de mediador ante María Dolores de Cospedal para consolidar en el PP de León a Martínez Barazón como presidente, aseguró que nunca llegó a realizar gestión alguna de este tipo.
Dividido en sesiones de mañana y tarde, el juicio ofreció casi cinco horas de preguntas y respuestas en las que las defensas subrayaron el tono exculpatorio de la versión de los testigos.
«El presidente me pidió los pliegos de las licitaciones de las cafeterías y a mi jefe de servicio le dijo que había que modificar unas notas en rojo que había puesto. ¿Que si era insólito? Yo advertí a mi jefe de servicio que había alguna cosa que podía no ser legal, él me dijo que una nota era ilegal pero que la otra era buena para la estación. Contacté con el presidente y me dijo que si era ilegal no se podía ponerlo. En ningún momento me sentí presionado», dijo Del Egido.
Papel secundario
Nadie recuerda que en las reuniones que se mantuvieron estuviera presente el interventor
«Queríamos que los hosteleros de la zona tuvieran preferencia si era posible. Nos interesaba que cada vez hubiera más empresas en el concurso porque suele ser una explotación deficitaria», señaló el entonces diputado. «No me suena que en ninguna de esas reuniones estuvieran Pedro Vicente o Jesús López», aseguró. «Diez años antes de que yo llegara ya se hablaba de la fusión de las dos estaciones y creo que todos los presidentes lo van a intentar. Lo que pasa es que hacía falta un estudio ambiental», señaló.
La fiscal Teresa Gálvez hizo ver a Del Egido las presiones que ante la Guardia Civil manifestó haber sufrido por parte del presidente en su declaración de 2015: «Con la perspectiva del tiempo, no veo mal aquel intento de fusión y que se intentara acelerar, cumpliendo con la legalidad vigente. Por mucha prisa que me hubieran metido, no hubiera servido de nada». No obstante «mis recuerdos de aquello son un tanto difusos».
«Aquello que sea legal, se pone y lo que no sea legal, se quita, fue lo que nos dijo», insistió Del Egido a preguntas de la defensa de Alejandro de Pedro, preguntado sobre la posición del presidente en los pliegos. «Nunca hubo presiones para que se adjudicara a ninguna empresa en concreto».
«Jamás hice llamadas a Cospedal para ponerla en contacto con el presidente de la Diputación de León», aseguró Donato Sánchez. Cuando se le reprodujo el whatsapp, insistió: «No entiendo qué tiene que ver y por qué hace esos comentarios. Yo, como se puede comprobar, no contesté a nada».