La Universidad expone todos sus tesoros didácticos
El Museo de Colecciones abre sus puertas en los sótanos de la antigua Escuela de Minas
Reproducciones de animales de granja, modelos de corazón de una vaca marina, el desarrollo del feto humano o el aparato reproductor femenino y el caballo, todos ellos del Auzoux, tiburones conservados, lampreas, osos, todo tipo de aves, decenas de miles de mariposas.... La Universidad de León ha hecho inventario, clasificado y expuesto materiales didácticos que empleaban sus alumnos de Veterinaria y Biología incluso en el siglo XIX, al que suman cientos de instrumentos, algunos llegados desde La Normal, donde se formaba el siglo pasado a los maestros, e incluso instrumental un poco más reciente con el que los universitarios han ido formándose en los últimos años, desde Minas hasta Económicas o los ingenieros.
El Museo de Colecciones de la Universidad está ubicado en los sótanos de la antigua Escuela de Minas, al lado de la Corredera, y también cuenta con varias salas en el actual Centro de Idiomas de la institución académica, lo que antiguamente fue la Escuela de Comercio.
«Se trata de poner en valor todo este material para que los universitarios puedan seguir formándose pero también para que vengan a visitarlo los alumnos de los colegios e institutos y toda la sociedad leonesa en general», señala el rector, Juan Francisco García Marín, quien ha señalado que parte de los animales naturalizados han sido donados por el Museo de la Fauna Salvaje de Valdehuesa y que en las vitrinas sólo hay una gran parte de todo lo que atesora la Universidad de León que ha ido recuperándose de despachos, aulas y de sus almacenes.
El «artífice» de la musealización ha sido Luis Miguel Fernández Blanco, quien señala que el museo puede visitarse en pequeños grupos y siempre con guías que irán desvelando todos los secretos que atesoran los materiales didácticos que han podido conservarse en la Universidad, entre ellos, la mayor colección, junto con otra en Nápoles, de modelos realizados por Auzoux, un revolucionario francés que ante el hedor de las disecciones cuando estudiaba medicina revolucionó con sus recreaciones en papel maché la educación en la década de 1820.
Las colecciones serán dinámicas para que pueda observarse todo el patrimonio científico, anatómico y animal con el que cuenta la Universidad de León, entre ellos 60.000 insectos, más de 2.500 animales naturalizados, 400 artrópodos o más de 2.500 especies de aves, «la mayor colección de toda España».El alcalde de León, José Antonio Diez, acudió a la inauguración de este singular museo y considera que será un aporte más a la ciudad de León porque se trata de «una exposición excepcional, con una gran variedad de especies y de mucha calidad».
«Ahora hablamos de bibliotecas de biodiversidad y con los ejemplares que tenemos aquí se podría secuenciar ya el ADN para ‘resucitar especies’, saber por qué se han extinguido o cómo ha influido el clima en su desaparición», comenta gráficamente Luis Miguel Fernández, quien explica todas y cada una de las piezas que ha ido recopilando y documentado para su musealización de forma muy teatral y atractiva para que cualquiera que se acerque al museo, no sólo aprenda, también se lo pase bien.