Los documentos no oficiales se rotularán ahora en llionés y castellano
Un año después de que quedara encima de la mesa por la falta del informe económico preceptivo, el Pleno aprobó por unanimidad, sin que se cuente con ese documento, la moción por la que el Ayuntamiento se compromete a «utilizar la doble rotulación, en castellano y en llionés, en los títulos y subtítulos de todos los documentos no oficiales».
El acuerdo reseña que «se entiende como tales aquellos que no requieran la firma de empleados públicos o cargos políticos, ni sean producto literal de acuerdo de cualquiera de sus órganos colegiados o unipersonales de decisión». Se añade que «se rotularán en castellano y en llionés los distintos soportes de información o difusión municipales».
La aprobación no entró en el problema que lo paralizó la vez anterior, cuando un informe marcaba que habría un coste asociado de 123.016,66 euros al año para contratar a quienes debían traducir los documentos. Entonces, el concejal promotor, Nicanor Pastrana, aclaró que se haría «condicionado a que no suponga ningún gasto adicional».