Los alimentos se encarecen casi un 17% en un año, la mayor subida desde 1994

Las medidas puestas en marcha por el Gobierno para contener el encarecimiento de los alimentos no han conseguido detener el alza descontrolada de los precios en febrero. Los datos del Índice de Precios al Consumo (IPC) del mes pasado destacan que en León el aumento de la inflación en este apartado sumó un 1,9%, una décima más que la media nacional, que se traduce en un encarecimiento del 16,8% de estos productos básicos. Y que se eleva al 21,4% en el caso de las bebidas no alcohólicas.

Un encarecimiento de la alimentación que supone el mayor aumento desde 1994, y frente al que las organizaciones de consumidores han reclamado más medidas al Gobierno.

El mes pasado subieron también con fuerza en León el capítulo de electricidad y combustibles, un 6,1% (a pesar de lo cual la evolución anual refleja un descenso del 10,5%); así como de los precios de los paquetes turísticos, un 5,2% más, hasta el 10%. También se encarecieron los servicios de alojamiento y la restauración y los comedores, que desde el año pasado registran incrementos del 8,9% y del 7,7%.

El mes pasado apenas bajaron sus precios en León el vestido y el calzado, aún en período de rebajas, así como los servicios de transporte. Los precios subieron en conjunto el mes pasado en León un 1%, frente al 0,9% nacional.

Alimentos sin control

Las harinas y otros cereales, junto con otros aceites comestibles distintos al de oliva, fueron las únicas dos categorías de alimentos con una rebaja o supresión del impuesto sobre el valor añadido (IVA) que se abarataron en febrero respecto al mes anterior.

Seis de los catorce grupos de alimentos con el IVA reducido o eliminado disminuyeron de precio desde enero, cuando entró en vigor la medida fiscal del Gobierno.

Una radiografía diferente a la de enero, el primer mes de aplicación de la rebaja de ese impuesto, cuando casi todos los alimentos a los que se les aplicó bajaron de precio respecto a diciembre, excepto el arroz y las legumbres y hortalizas frescas.

En este segundo mes de aplicación, en febrero, los precios de los alimentos y las bebidas no alcohólicas subieron el 16,6 % en comparación con el mismo mes de 2022, más de un punto por encima de la tasa interanual del pasado enero.

Para contener la inflación alimentaria, el Gobierno decidió, en su último paquete de medidas contra los efectos de la guerra en Ucrania, suprimir el IVA durante seis meses al pan común y a las harinas panificables; la leche, los quesos y los huevos, así como las frutas, las verduras, las hortalizas, las legumbres, los tubérculos y los cereales que fueran productos naturales o frescos. Además redujo el IVA del 10 al 5 % a los aceites de oliva y de semillas, y a las pastas alimenticias.

De todos esos alimentos, otros aceites comestibles se abarataron el 2,5 % en febrero respecto a enero, mientras que la bajada fue del 0,4 % para las harinas y otros cereales. El resto se encareció.

Entre las mayores subidas mensuales de precio estuvieron las de legumbres y hortalizas frescas o refrigeradas (+11,2 %) y las frutas frescas o refrigeradas (+5,4 %).

En los dos primeros meses del año, las legumbres y hortalizas frescas acumularon un aumento de precio del 11,3 %, seguidas del arroz (+5,9 %), el aceite de oliva (+1,5 %) y las patatas (+1,3 %).