León estrenará este año un piloto que asegurará la comunicación cuántica

A finales de este año estará listo el demostrador de claves cuánticas que desarrollarán el centro de Supercomputación de León e Incibe a través del Plan Complementario de Comunicaciones Cuánticas en Castilla y León. El director general de Scayle, Vicente Matellán, explicó que ya existen ordenadores cuánticos capaces de romper las claves de cifrado de estas complejas comunicaciones y que el piloto que se desarrollará en León se pondrá a disposición de las empresas para aumentar su seguridad ante posibles ataques a fin de proteger datos bancarios, personales o información confidencial.

«Será uno de los primeros de España. Estamos a punto de licitar el tendido de fibra y ya estamos viendo qué empresas pueden servirnos los componentes para el demostrador», incidió Matellán, quien concretó que a finales de año el piloto ya estará funcionando y ofrecerá sistema de encriptación. «Los ordenadores cuánticos están a punto de existir y romperán las claves de cifrado. Cuando nos comunicamos con un mensaje cifrado esas claves con un ordenador convencional hoy en día no se pueden romper porque requiere un cálculo de miles de años pero con los ordenadores cuánticos sí. Cuando los tengamos, las seguridades van a estar comprometidas», explicó Matellán en relación al trabajo que se llevará a cabo en León para cifrar esas comunicaciones.

La consejera de Educación, Rocío Lucas, señaló que Castilla y León se sumó a la convocatoria estatal con fondos Next Generation para seguir impulsando «el ecosistema» ya existente y apostar por el I+D+i y, por su parte, el subdelegado del Gobierno, Faustino Sánchez, dijo que el objetivo de los planes complementarios era apostar por «áreas estratégicas ya potentes y mantener y mejorar la investigación». Lucas alentó a «trabajar en este tipo de tecnologías», pero incidió en que corresponde a las administraciones desarrollar iniciativas para poner esta tecnología a disposición de las empresas y potenciarla en ámbitos como los de la informática o la salud. Sánchez recordó que Castilla y León participa en tres de estos planes complementarios, además del de Comunicación Cuántica, los de Agroalimentación y Materiales Avanzados, con un horizonte de desarrollo a tres años.

El Plan Complementario de Comunicaciones Cuánticas de Castilla y León es un proyecto coordinado por el Scayle, cofinanciado por el Ministerio de Ciencia e Innovación y la Junta de Castilla y León por un importe de 3,5 millones de euros en el marco de los fondos Next Generation EU. En el consorcio participan las Universidades de Burgos, Salamanca y Valladolid y se trata de un proyecto alineado con las iniciativas clave europeas en esta área, tanto del Quantum Flagship como de la European Quantum Communications Infrastructure, mediante la creación de infraestructuras punteras y actuando como motor de la industria cuántica europea.