La vía desmantelada de León a La Robla puede salvar la Vía de la Plata

La ropa vieja que muda la vía entre León y La Robla podrá tener un destino muy poco habitual, pero productivo para la provincia de León.

La asociación ferroviaria Reino de León promueve ya la iniciativa para trasladar todo el material resultante de la reforma acometida, y la que está pendiente de afrontar para adecuar el pasillo de la alta velocidad en el tramo previo al emboquille de la Variante para cimentar la reconstrucción de la Ruta de la Plata, entre Astorga y La Bañeza.

«A Adif la destrucción de las traviesas le supone un coste económico elevado; cuesta más destruir que reutilizar», analiza Eduardo Tocino, secretario de esta asociación ferroviaria, que coloca en el tejado de la voluntad política este traslado y tránsito de material para hacer real la resurrección de un trazado cerrado hace casi cuarenta años por el Gobierno socialista. «Que pase de las palabras a los hechos, de las buenas intenciones y las buenas palabras, a la obra», indica Tocino, también concejal responsable del área de infraestructuras del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de León.

Para cimentar la propuesta de Reino de León se aportan algunos datos de equilibrio y semejanza entre los dos tramos afectados por esta reutilización; la distancia de la vía que se levanta entre León y La Robla es idéntica a la que separa Astorga de La Bañeza; el material retirado es apto para velocidades de 160 kilómetros por hora, más que adecuado para el tramo, que espera una oportunidad para desarrollar transporte de mercancías en el flanco oeste de León, y del costado poniente de la península; se trata de traviesas de hormigón monobloque; el calibre del carril es de 54 kilos por metro, de mayor sección que el que está desplegado y fuera de uso desde 1985 por la Ruta de la Plata; igual que los apartos de vía o cambios de aguja para colocar en apertura de estaciones o apartaderos junto a los polígonos industriales que esperan mejorar sus conexiones con la vuelta del tren en este corredor del abandono en la provincia leonesa.

«Lo que decimos es que no se repita la destrucción escandalosa de bienes públicos que tienen una segunda vida útil; el propio Adif realiza estas operaciones de reutilización en Asturias, aunque en León hay vías cerradas que no tienen oportunidad pese a disponer de opciones de abrirse con un coste más reducido», argumenta Tocino, que recuerda que en la retirada de la zona, el recinto de Astorga Puerta de Rey, Astorga San Andrés y Valderrey se dejaron disponibles más de 55.000 metros para almacenar el género que se releva en el tramo de León a La Robla.

Allí, sobre el pie de la antigua ruta, se sustituirían las traviesas de madera por las de monobloque PR-01; y el carril, que mejora el que quedó anclado por el cerrojazo. Entre León y La Robla está pendiente de acometer el cambio de material en la vía izquierda para dar molde a la alta velocidad.