Y la nieve llegó a León

Se cumplió lo prometido. Las previsiones metereológicas anunciaban nieve en León para este viernes y así ha sido. 

La webcam de la estación invernal de San Isidro ofrecía a primera hora de esta mañana una imagen insólita a estas alturas de la primavera con una capa de nieve que ya se preveía a 1.500 metros. La estación está a 1.950 metros y ya luce un manto blanco inusual a mediados del mes de mayo.

El descolgamiento de una bolsa de aire frío ha sido el causante del desplome de las temperaturas y se prevé que provoque tormentas y nevadas por encima de los 1.500 metros de altitud, como ha sido el caso de León.

En la estación de esquí Valle de Laciana-Leitariegos, la nieve parece que no ha hecho acto de presencia de momento, si bien las temperaturas también son bajas; mientras que en Collado-Jermoso, cuyo refugio estña situado a una cota de 2.064 metros, el tiempo es también muy inestable y se aprecian brumas y bancos de niebla desde primera hora de este viernes, algo que también sucede en el valle de Valdeón, a 950 metros.

En otros puntos de la provincia los copos no han hecho acto de presencia, como en el valle de Laciana.

Este viernes se registrarán lluvias, chubascos y alguna tormenta que pueden ser persistentes en el litoral Cantábrico oriental y norte de Navarra, precipitaciones que podrán ser localmente fuertes en amplias zonas del extremo oriental peninsular y Baleares, y con descenso generalizado de temperaturas, según informa la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Esta misma mañana el bajón en los termómetros ya se dejaba sentir con fuerza y se registrarán lluvias, chubascos y alguna tormenta que pueden ser persistentes en el litoral Cantábrico oriental y norte de Navarra, precipitaciones que podrán ser localmente fuertes en amplias zonas del extremo oriental peninsular y Baleares, y con descenso generalizado de temperaturas, según informa la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Tiempo variable durante el fin de semana

Existe incertidumbre sobre el tiempo durante el fin de semana, pero el embolsamiento de aire frío en altura mantendrá en la vertiente cantábrica y en el Pirineo las precipitaciones. Tras esto, la dorsal entrará de nuevo por el Atlántico y las temperaturas ascenderán.