El 'Come y calle' pende de un hilo tras una argucia del Ayuntamiento para hacer negocio

El 'Come y calle', uno de los eventos más emblemáticos de las fiestas de San Juan y San Pedro de León, pende de un hilo tras una argucia del Ayuntamiento para hacer negocio y a espaldas de los organizadores y creadores

Este año Come y Calle ha tratado de sacar adelante el evento desde hace meses, a través de varias solicitudes por sede electrónica, sin obtener respuesta, y diversas reuniones con la corporación municipal.

Sin embargo, a poco más de un mes de su inicio, el Ayuntamiento de León ha decidido sacar este proyecto a licitación pública en mayo, dejando un margen de unos 10 días desde su concesión para su realización, "con unas condiciones draconianas", consideran en la organización.

"El Ayuntamiento de León ha decidido así que el esfuerzo de la organización de más de siete años pueda llegar a su fin de la manera más burda posible", aseveran

Se preguntan: "¿Podríamos imaginar que algo así pudiera ocurrir con el Sonorama, el Mercado de Motores, el Primavera Sound o el Purple Weekend?".

"Seguro que muchas y muchos querrían organizar ahora esos eventos, pero entendemos que las instituciones deben proteger las ideas, la innovación, la experiencia, el esfuerzo y la iniciativa local".

En León no hay ningún otro evento de iniciativa privada con el que esté ocurriendo lo mismo, por lo que la organización sigue exigiendo una explicación, no obtenida, de la causa que lo ha motivado.

"Apelamos a la ética, a la igualdad y a las buenas prácticas del Ayuntamiento de León, para conseguir que recapaciten y den marcha atrás a un atropello de esta magnitud, que puede desembocar en la degradación y desaparición del Come y Calle".

¿Qué es el Come y calle?

Hace siete años un grupo de jóvenes emprendedores iniciaron "con enorme ilusión" un proyecto novedoso en León con el que dinamizar las fiestas patronales de León, consiguiendo que este proyecto tenga una imagen de marca y calidad reconocida en varias ciudades. Es el Come y Calle. 

Come y Calle desarrolló un nuevo modelo de ocio que no existía en la ciudad en 2017.Una apuesta arriesgada y casi imposible, pero consiguió que los foodtrucks empezaran a decorar durante unos días el paisaje del jardín de San Francisco. Hoy, más de la mitad de los que participan son parte de la hostelería local, e incluso algunos tienen sus propios locales físicos.

 Desde sus inicios, Come y Calle ha programado actividades para todos los públicos, como exhibiciones de baile, de ajedrez, talleres infantiles, actuaciones de magia, teatro de calle, un mercado muy cuidado, y, por supuesto, ha apostado claramente por la música en directo, con una gran programación de conciertos.

Por sus escenarios han pasado grupos alternativos de la talla de Hinds, La Bien Querida, Ladilla Rusa, Joe Crespúsculo, El Último Vecino, La Plata o Shego, entre otros muchos, que hoy encabezan los carteles de todos los festivales, recuerda la organización en un comunicado.

También ha sido un lugar donde se ha consolidado el festival municipal Suena León, y donde desde Come y Calle siempre se ha dado apoyo a proyectos y bandas leonesas.

Todas estas actividades han sido ofrecidas de manera completamente gratuita a la ciudadanía leonesa y a todo el mundo, colaborando con el Ayuntamiento de León para ofrecerlas dentro de la programación de las Fiestas de San Juan y San Pedro y San Froilán. 

Come y Calle genera hoy en día más de 60 empleos directos y también empleos indirectos. Come y Calle no ha recibido nunca ningún patrocinio del Ayuntamiento de León y ha pagado las tasas de ocupación de espacio público que en cada momento se le han solicitado, además de los correspondientes impuestos, subrayan los organizadores en el comunicado.

"Este proyecto ha ido creciendo desde la nada hasta convertirse en el gran referente de las fiestas patronales de León", siendo en la actualidad un espacio de disfrute y convivencia sociocultural para todas las edades y condiciones, respetuoso con el medioambiente, el jardín de San Francisco, el vecindario y los horarios establecidos.