Olegario Ramón: «La ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones se va a aprobar; no manejo otro escenario»

La entrevista tiene lugar el martes por la mañana en el despacho de la Alcaldía de Ponferrada. La campaña electoral entra en su semana definitiva. Para Olegario Ramón y para todos los candidatos. El domingo hablan las urnas.

—¿Cuál es su quiniela para las elecciones municipales del próximo domingo 28 de mayo?

—Sólo diré que el Partido Socialista va a ser el vencedor de las elecciones, incluso no descartaría que fuera con un resultado notablemente mejor que las pasadas, y que, en cualquier caso, y eso sí, en cualquier caso, le va a tocar gobernar al Partido Socialista.

—Por lo que dicen las encuestas, a la hora de los pactos, entre el PRB de Tarsicio Carballo y Coalición por El Bierzo de Iván Alonso, ¿con quién se queda si tuviera que elegir?

—Yo prefiero gobernar solo. Si los resultados del 28 de mayo no permiten gobernar solo, esa texitura me la plantearé el 29. Ahora mismo, no me la planteo.

—Hace unos días, en un debate, no vio con buenos ojos el proyecto estrella de CB, un soterramiento que saldría desde la avenida del Castillo hasta la Cruz de Miranda. Pero si ese proyecto fuera el ‘precio’ de un hipotético pacto con Coalición por El Bierzo, ¿lo asumiría?

—Creo, sinceramente, que ese proyecto es irrealizable. El proyecto adecuado, posible, aunque muy complejo, es la ronda sur. Lo he consultado con ingenieros, técnicos de patrimonio, y todos coinciden en lo mismo. El proyecto razonable, aunque complejo y difícil, es la ronda sur.

—En Ponferrada se presentan 12 opciones a las elecciones del próximo domingo. Eso implica que puede haber votos a pequeños partidos que influyan con la Ley D’hont en el reparto final de concejales. ¿Cree que esos restos pueden condicionar los resultados en Ponferrada?

—Yo pido a la ciudadanía, apelo al voto con cabeza más que al voto con corazón. No todo lo hacemos bien y puede haber gente que esté enfadada y decida apostar por opciones de izquierda que se sabe que no van a obtener representación. Eso es algo así como tirar el voto a la basura, e incluso abrir las puertas del Ayuntamiento a la derecha y a la ultraderecha. Por eso apelo a ese voto con la cabeza.

—¿Qué plantea Olegario Ramón en estas elecciones? ¿Cuál es su modelo de ciudad para Ponferrada?

—El modelo de ciudad para Ponferrada tiene que ver bastante con lo que ya hemos diseñado, especialmente en la segunda mitad del mandato. No podemos olvidar que hemos pasado casi la mitad del mandato haciendo frente con todos los medios personales y materiales a la pandemia. Tiene que ver con esa Ponferrada que crea empleo, especialmente ligado a las industrias renovables y con esa ciudad verde, sostenible, que democratiza los espacios públicos, comprometida con la igualdad de género, y que va en línea de ser plataforma intermodal, en la línea de la plataforma agroalimentaria, en la línea de trabajar por continuar reformando el polígono de La Llanada, o construir vivienda social, o llevar a cabo los proyectos que ya se están ejecutando. Más de 13 millones de euros de ejecución de fondos europeos.

—Si no gobierna después del 28-M, ¿seguirá en el Ayuntamiento de Ponferrada en la oposición como concejal?

—Creo que es mi obligación por respeto a la ciudadanía. La ciudadanía te sitúa en una posición en la Casa Consistorial y creo que, por respeto a esa ciudadanía, he de hacerlo.

—¿Cree que en estas elecciones municipales la política nacional está perjudicando, en el caso del PSOE, a lo candidatos locales? Lo digo por la polémica como los presos de ETA en las listas de Bildu cuando hace cuatro años fue al contrario. A usted le ayudó mucho el impulso de PSOE nacional.

—Creo que a la ciudadanía de Ponferrada le importa que se haga la nueva fase de la senda del río, que se hagan esas viviendas sociales, o que se hagan tres comunidades energéticas. Realmente, los temas nacionales se deben resolver en sede nacional. Aquí estamos preocupados por los temas que nos afectan a nosotros.

—¿Se equivocó al plantear las primeras obras de la Zona de Bajas Emisiones antes de las elecciones? De hecho, no ha podido aprobar la ordenanza.

—No había otra opción. La opción era renunciar a ayudas europeas de un importe de más de tres millones de euros. Es que el momento no lo elegí yo. La convocatoria de fondos europeos fue cuando fue y nosotros lo que hicimos es estar bien preparados para conseguir más de tres millones de euros para revalorizar una zona que está degradada, que va a revitalizar el comercio, revalorizar las propiedades y, además, va a mejorar la salud de la gente. El tiempo de hacerlo lo marcó esa convocatoria de fondos europeos.

—¿Y cree que es la mejor una zona cuando está a 800 metros de un centro comercial como El Rosal?

—Es la opción razonable. Otras opciones menos razonables no tendrían el amparo de la Unión Europea, sin ningún género de dudas, y perderían ayudas por importe de más de tres millones de euros.

—Si no se aprueba esa ordenanza, porque no tiene los votos necesarios en el próximo mandato, ¿habrá que devolver las ayudas europeas?

—Es que la ordenanza se va a aprobar, con lo cual no manejo el escenario de que no se apruebe.

—Hay otra polémica en ciernes. Estamos a las puertas ya de la Noche Templaria, uno de los grandes eventos de Ponferrada. ¿Por qué no se utiliza el Castillo para la cena templaria cuando se ha utilizado para otros actos recientes?

—Es que no tienen nada que ver. No se utiliza, principalmente, porque el fin de semana del año que más gente visita Ponferrada, queremos que la fortaleza templaria, nuestra joya patrimonial, la puedan disfrutar. Recuerdo que el año pasado fueron 6.000 personas. 6.000 personas que irían a sus lugares de origen hablando fatal de la ciudad si esa fortaleza, nuestra principal joya patrimonial, no estuviera abierta. Además, también hay razones de protección de la joya patrimonial que es el Castillo.

—Pero hay actos que se han hecho en el Castillo.

—No tienen relación con tener cerrado el Castillo dos días con toda la logística que supone la entrada continua de vehículos al Castillo, y todo lo que supone la organización de la cena templaria. Esa comparación no es posible.

—Ponferrada, si se mira el mapa de las infraestructuras, es una ‘isla’ en la alta capacidad ferroviaria. ¿Cree que alguna vez se hará esa solución al ‘Lazo del Manzanal’? ¿Y cree que está siendo lo suficientemente reivindicativo?

—Ponferrada es muy reivindicativa y lo va a seguir siendo. De hecho, gracias a que el alcalde de Ponferrada viaja, se mueve, trabaja, se relaciona...

—Todos los alcaldes han trabajado, supongo.

—Se consigue la oficina de la DGT, se consigue el convenio con el Catastro, se consigue la ayuda para hacer el Colomán Trabado, se consiguen ayudas para Tvitec o Emobi, se consiguen inversiones del Instituto de Transición... Yo sí tengo la esperanza de que se haga esa solución porque, si aparece por primera vez en los Presupuestos Generales del Estado la palabra ‘Lazo del Manzanal’, y además se va a incrementar, eran 200.000 euros en tres ejercicios presupuestarios, y finalmente van a ser 500.000 en uno solo, creo que hay motivos para la esperanza Si además estamos desarrollando un proyecto de apartadero ferroviario, subvencionado por la Unión Europea, con el compromiso de Adif de conexión a la línea general, creo que también hay motivos para la esperanza. Por lo tanto, creo que sí; como también creo que es una noticia muy buena, aunque llegue tarde, que se vaya a licitar el primer tramo berciano de la A-76, Villamartín-Requejo, por 176 millones de euros.

—Hay otra ordenanza que viene por delante y esa la de terrazas. ¿Se suprimirán terrazas?

—La ordenanza ya está en vigor. Ahora mismo lo que se está haciendo es que aquellas terrazas que están ocupando espacio público, y que no están siendo usadas, han sido requeridos todos los propietarios para que las retiren con carácter inmediato. Hay terrazas que es claro que no van a poder ser legalizadas, por su estructura, por su tamaño, y también han sido requeridas. Al resto se les requiere para que en el plazo de tres meses procedan a legalizarse. Si son legalizables, se legalizarán, y si hay que tomar medidas de acortar algunas, o incluso quitar algunas, pues se hará. Se va a aplicar la ordenanza que, recuerdo, se aprobó en consenso con el sector.

—¿Se va a retirar, si sigue de alcalde, el parklet en la bajada del Castillo, donde no se sienta nadie?

—El parklet, en el que yo veo muy a menudo gente sentada, fue subvencionado por la Unión Europea. La UE, cuando subvenciona algo, es porque va con los criterios de la propia Unión Europea. Se puede cambiar de lugar. De momento, no se va a cambiar, pero no quita de que en el futuro se pueda hacer. Es una experiencia en la línea de quitar coches de la línea de aparcamiento para ganarlo para disfrute de la ciudad.

—¿Cree que se tiene que aplicar la ORA en barrios como La Rosaleda, teniendo en cuenta que la Zona de Bajas Emisiones va a hacer que muchos vehículos busquen aparcamiento fuera del radio de la ZBE?

—La ORA no se va a aplicar con el Partido Socialista. No se va a aplicar en el barrio de La Rosaleda. El planteamiento del Partido Socialista de la ORA, más allá de planteamientos demagógicos de que se va a quitar, es una opción sensata. Cualquier sistema de regulación del estacionamiento no es para recaudar; es para ayudar al sector comercial. La opción del PSOE va a ser reducir los espacios en los que ahora hay ORA, pero la ORA no va a desaparecer. Yo no quiero engañar a los ciudadanos.

—Ponferrada pierde población ¿Sólo se debe a la reconversión del carbón o también a su gestión municipal?

—Ponferrada ha perdido población este mandato, pero de los últimos tres mandatos es el que menos población ha perdido. Es más, desde el 1 de enero de este año hemos ganado 217 habitantes. Por lo tanto hay motivos para la esperanza. Las razones de la despoblación se las explicó muy bien la ministra Ribera al presidente de la Junta de Castilla y León en una carta que le envió, y no me remito a ella, porque básicamente son ésas.

—Es un poco hacerse trampas al solitario mirar para otros mandatos, o decir que crece en 217 habitantes en los últimos meses. Lo cierto es que Ponferrada está cayendo en población.

—Lo que está claro y eso lo dice el Padrón es que, desde el 1 de enero a día de hoy ha ganado 217 habitantes.

—¿Es partidario de mantener las torres de Compostilla?

—Es un planteamiento que ahora mismo no me corresponde ni siquiera valorar, porque hubo mucho tiempo, desde que se conoció, para, aquellos que entendían que se debían mantener, iniciar los procedimientos oportunos. Es que, en este tema, el señor Morala ha hecho el ridículo espantoso. Sale diciendo que no hay otra solución más que tirarlas porque está la dinamita puesta y no había ninguna idea más allá de un chascarrillo de bar. O un anuncio en un tuit, y a los pocos días salió diciendo que qué maravilla que se mantuvieran. Yo creo que ni lo uno ni lo otro..

No digo que no se deban mantener. No tengo un criterio suficiente para determinarlo. Lo que está claro es que no se intentó cuando se tenía que hacer.