De la restauración ambiental a los proyectos renovables, el Futur-e y el Ponfeblino

Los cuatro millones de euros que el Instituto de Transición Justa aprobó para materializar el proyecto del tren turístico Ponfeblino lo convierten en una de las inversiones más fuertes, solo por detrás de la restauración de escombreras de carbón en la cuentas Fabero-Sil y Bierzo Alto, con más de 70 millones. Tanto lo uno como lo otro quedan pendientes para la próxima legislatura, aunque la restauración ya ha comenzado.

A expensas de ejecución han quedado también el Centro Tecnológico de la Castaña de Igüeña, la plantación de castaños en el Bierzo Alto y el proyecto de reciclaje de placas fotovoltaicas para el polígono industrial de Bembibre, que quedó excluido de la primera convocatoria de los fondos de transición por falta de presupuesto.

Los parques eólicos y fotovoltaicos que han ido superando fases administrativas en los últimos meses son otro de los asuntos que quedan pendientes, así como resolver del destinos de los terrenos ocupados por la central térmica Compostilla II (Cubillos del Sil) una vez finalice el desmantelamiento. Qué pasará con las torres de la térmica también será tema de próxima legislatura.