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La UPL también tiene la llave de la Diputación y podrá imponer condiciones

El huracán de voto leonesista en los partidos de León y Cistierna recrea un nuevo reparto de poder en la Diputación

Palacio de los Guzmanes, sede de la Diputación. RAMIRO

León

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La gestión de la Diputación de León se asoma a una situación desconocida en los últimos mandatos; inédita, si se tiene en cuenta que la posición de fortaleza electoral en los partidos judiciales de León y Cisterna colocan a los leonesistas en una posición envidiable para dominar e imponer condiciones.

Sin escrutinio oficial por demarcación de partidos judiciales, la criba de los resultados municipales hacían anticipar a última hora de la noche de que el diputado del partido judicial de Cistierna iba a caer del lado de la UPL; se sondeó ese éxito con los triunfos por mayoría absoluta en Sabero y Cistierna,  en Burón, el liderazgo en Valderrueda, el gran resultado en un atomizado reparto de votos y concejales de Boca de Huérgano, el gran resultado logrado en Picos de Europa, que le ha reportado dos concejales a las siglas leonesistas; feudos históricos de PP y PSOE, asaltados por una ola de tendencia de voto desconocida en el extremo noreste de la provincia; la subida de marea de la UPL, y también a falta del cierre y suma de los votos en los municipios del partido judicial de León, hará imposible repetir el reparto polarizado de otras veces.

El peso de la capital leonesa podría ser determinante para que el PSOE mantuviera la ventaja sobre el PP en el reparto de los trece diputados del partido judicial de León; pero también la emergente UPL, para lograr su segundo diputado en este partido judicial, que le permitiría asentarse en el Palacio de los Guzmanes con tres diputados en la composición definitiva del salón de plenos provincial. 

Anoche, también a falta de recuentos oficiales y de que la sala de máquinas del Ministerio del Interior confirme el reparto,  el aire electoral en el partido judicial de Ponferrada llegaba con vientos de cambio; el PP saboreaba el triunfo sobre el PP, en un vuelco a los últimos resultados, que definieron un triunfo socialista por cuatro diputados a tres.

No hay margen ni lugar a discusión en la hegemonía del voto popular en los partidos judiciales de La Bañeza y Sahagún, que otorgarán las actas con color azul para cada uno de sus representantes; tampoco para deshacer el reparto del partido judicial de Astorga, en tablas históricas; con esa proyección, mientras se esperan los ajustes y datos oficiales que cierren la suma de cada uno de los seis partidos judiciales leonesa, ni PP ni PSOE llegarían a  la constitución del nuevo plenario provincial con mayoría absoluta; allí esperará la UPl, con la llave y la cerradura, en la mano.