Los bares de las piscinas no tienen quien los atienda
El Ayuntamiento licita a contrarreloj en La Palomera y el Hispánico
Apenas a 15 días de la apertura de la temporada, el Ayuntamiento de León se pone ahora a buscar quién dé servicio en los bares de las piscinas de La Palomera y el Hispánico. En la primera, hace un año, con el final de la época estival, se bajaron los trapas sin que hubiera atención pese a las peticiones de los usuarios de los equipos que entrenan y juegan durante todo el año en las instalaciones, mientras que en la segunda el pasado verano ya tuvieron que conformarse con las máquinas colocadas en el pasillo.
Los técnicos encargados no tienen casi margen de maniobra. El anuncio oficial deja para el 15 de junio a las 14.00 horas la fecha tope para la presentación de las ofertas. A partir de esta fecha debe convocarse la mesa de contratación para resolver, pero si no hubiera licitantes, como ha sucedido ya con otros contratos a contrarreloj como el recinto ferial, tendrían que aportar por una solución de urgencia en la que estaría complicado llegar a tiempo.
Aunque la resolución en este caso no apareja otra dificultad que validar los requisitos y resolver a favor de la oferta más alta. Los 100 puntos de la licitación, como se apunta en los pliegos de condiciones, se darán a quien ponga la cifra más alta por encima del tipo mínimo, fijado en 16.800 euros por cada una de las dos anualidades en las que estará obligado a mantener el servicio. El cálculo del canon, como se justifica en el documento, busca «posibilitar su adjudicación debido al incremento de costes fijos de suministro al que tiene que enfrentarse el adjudicatario y la caída de ingresos debido al cambio de hábitos sociales por la situación pandémica sufrida, donde los ciudadanos están sufriendo las consecuencias de una terrible subida de todos los precios debido a una inflación desmesurad».
No hay más obligaciones contractuales, ni se especifica que el adjudicatario tenga que asumir costes de reforma en las instalaciones. Pero sí que se recoge que el hostelero encargado mantendrá unos deberes de apertura. El documento reseña que en la cafetería exterior de las piscinas de La Palomera tendrán que atender a los usuarios «durante el horario de funcionamiento de la temporada» estival, aunque además se incide en que no podrán cerrar «durante las actividades deportivas anuales programadas por la Concejalía de Deportes», en las que la prestación se hará «ininterrumpidamente». En el Hispánico, la jornada queda ligada al «horario de apertura de la instalación deportiva», como se avisa en los pliegos.