Henar Álvarez: «Aún no he tocado techo, espero seguir haciendo cosas»
«He tenido menos dificultades por el momento legal, pero he tenido que trabajar mucho durante los últimos 20 años, sin parar, aunque también ayuda un poco la suerte y, sobre todo, un equipo que te impulse en el grupo de investigación», explica Henar Álvarez Cuesta, que ahora con 45 años, es catedrática de Universidad de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social desde febrero de 2022.
Desde que consiguió la acreditación hasta que obtuvo la cátedra no llegó al año, aunque el proceso que más se dilató fue el de la acreditación, paso previo a conseguir postularse a una cátedra universitaria. «Ahora es más rápido, pero está pendiente qué pasará con la nueva ley de universidades, la Losu, que aún tiene muchas cosas en el aire», indica.
Henar señala que hasta ahora ha habido pocas catedráticas, «porque no habíamos tenido tiempo de llegar», en relación a la incorporación de la mujer al ámbito académico, un proceso que comenzó hace 20 años y ya se está haciendo patente, como ocurre en su departamento: «Somos tres catedráticas y dos catedráticos». Pero a mayores, concreta que antes la carrera de los profesores universitarios se orientaba a conseguir el máximo rango que era y es «una carrera de obstáculos y una maratón».
La catedrática de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social sentencia: «Aún no te tocado techo, espero seguir haciendo cosas». Aunque continúa con la misma carga docente que antes, su objetivo es seguir investigando, «pero ahora como catedrática tengo más libertad en la investigación y en la decisión de las investigaciones, además de mayor visibilidad», pese a ello, este cargo también implica más responsabilidad en la gestión.