La UPL busca ganar un diputado para llevar el leonesismo al Congreso

El leonesismo logró en las últimas elecciones municipales un resultado histórico en los ayuntamientos cuando consiguieron cinco concejales en León, además de alcaldías tan destacadas como San Andrés del Rabanedo, Sariegos, Santa María del Páramo o Cistierna.

En esta última llamada a las urnas para elegir alcaldes, que se celebró el 28 de mayo , la UPL consiguió casi 37.000 votos, lo que le dio 235 representantes en los consistorios, doblando el número de concejales obtenidos hace cuatro años. Con estos precedentes, los leonesistas encaran la recta de estas convocatoria a las generales con la esperanza de conseguir, por primera vez en su historia, un representante en el Congreso .

León cuenta ya sólo con cuatro diputados y cuatro senadores, consecuencia de la merma de población, lo que repercute en las posibilidades de los leoneses para elegir a sus representantes en los órganos nacionales. La UPL quiere pelear por uno de esos diputados , consciente de que la Ley d’Hont imprime más dificultades a la consecución de un senador. Según los cálculos que baraja el propio partido leonesista, sería necesario que el próximo 23 de julio consiguieran el apoyo de más de 40.000 leoneses, y que incluso sería necesario superar la barrera de los 42.000 para que Miguel Ángel Díez Cano pueda ocupar un escaño.

En la memoria, los más de 41.000 votos conseguidos por José María Rodríguez de Francisco en los comicios del 12 de marzo de 2000, que ya entonces dejaron a los leonesistas a las puertas de la escalinata del edificio del Congreso. Entonces eran seis los diputados a elegir y se fueron cuatro para el PP y dos para el PSOE, con Zapatero y Amparo Valcarce (hoy secretaria de Estado de Defensa) . Ahora son cuatro y el bipartidismo ha dado paso a un maremagnum de fuerzas políticas —doce de ellas con candidaturas en León—, entre los que se repartirán los votos de los 422.876 leoneses que están llamados a las urnas el domingo 23-J.

El auge del leonesismo que arrancó en 2022 en las elecciones autonómicas con tres procuradores y 48.144 votos quiere seguir creciendo. Con las generales, que concentran los votos en una lista única frente a las municipales, donde en cada ayuntamiento se vota a una candidatura, favorece la unión del leonesismo que ya confía en sentarse en el Congreso. Atrás quedan los casi 10.200 votos que consiguieron en las últimas generales de noviembre de 2019 y una nueva estela marca el rumbo iniciado desde entonces.

Ni en 2011, ni 2015 ni en la primera llamada a las urnas para elegir presidente en 2019, la UPL presentó candidaturas para la Cámara Baja, aunque en el resto de los comicios de una forma u otra —únicamente al Senado, con otras agrupaciones o sin cubrir una lista con todos los candidatos—, la UPL ha concurrido a las elecciones generales. Pero en esta ocasión presentará por primera vez listas completas, tanto para el Congreso como para el Senado y, además, cuenta también con candidatura en las dos provincias, Salamanca y Zamora, que integraron el histórico Reino de León. La lista al Congreso la encabeza Miguel Ángel Díez Cano y la completan Bernardo Luis García Angulo, Lara Pintor Cascón y Sara Herrero, mientras que la lista a la Cámara Alta está integrada por Javier Callado Cobo, Mónica Rey García y María Montserrat Carbajo Carro.

Con el mayor poder local obtenido desde su creación en 1986 (bajo las siglas de Unión Leonesista, Unle) con más de una veintena de alcaldías, en más de la mitad de ellas con mayoría absoluta, los leonesistas recogen ahora la espita que se encendió con las reclamaciones para exigir que la provincia dejase de perder población, de un mayor tejido industrial y de posibilidades para que los jóvenes leoneses no tengan que emigrar.

Su aspiración de conseguir la ansiada autonomía de la Región Leonesa quedó patente en la moción que se fue presentando en los ayuntamientos, donde consiguieron el respaldo institucional de municipios que llegan a representar más de 50% de la población que ahora residen en la provincia y pese a tener en contra a los grandes partidos como PP y PSOE, que bloqueó que esta propuesta, por ejemplo, no saliese adelante en la Diputación de León.

Una recriminación de la formación púrpura: «La espita del leonesismo no la hemos encendido sólo nosotros, es cierto que lo hemos hecho bien, pero es el trabajo y el esfuerzo de muchos, de las asociaciones o del leonesismo social. Las mociones despertaron algo adormecido, pese a que los grandes partidos tratan de no dejar que la gente exprese su opinión política».

La estrategia que plantea la UPL es convertirse en la voz de los leoneses en Madrid, ser un altavoz para que la provincia consiga el desarrollo que se merece y, si se puede, la autonomía de la Región Leonesa. Está por ver qué pasará el 23 de julio, si los leoneses introducen en los sobres blancos el suficiente número de papeletas para que después de casi cuatro décadas después de su formación, la Unión del Pueblo Leonés consiga un diputado en el Congreso. Aún queda campaña hasta el domingo en que se abrirán las urnas y los leonesistas echarán el resto para movilizar a la provincia apelando al voto útil para que, por primera vez, un partido con León en el nombre consiga hacerse un hueco en Madrid. PP, PSOE y Vox, también podrán un precio muy caro a cada uno de los votos.