La Junta admite que no habrá médicos pero niega la Facultad de Medicina a León
Con 242 médicos de familia en León que avistan el horizonte de jubilación en los próximos 10 años, en los que además se prevé que pasen a las clases pasivas otros 253 facultativos, el consejero de Sanidad de la Junta, Alejadro Vázquez, asume que « el problema es importan te». La preocupación, cifrada en 1.772 efectivos en toda la comunidad, aumenta cuando admite que la tasa de reposición con los residentes que terminan Medicina Familiar y Comunitaria «no va a dar de ninguna manera, por lo menos hasta 2028», es decir, hasta dentro de cinco años, que es donde se encuentra el grave problema con más de 900 efectivos que colgarán el fonendo. Pero mientras, con la radiografía convertida en endémica, la administración autonómica se niega a que la Universidad de León pueda abrir la Facultad de Medicina que reclaman la comunidad universitaria y el Colegio de Médicos .
Vázquez reseña que la prolongación del servicio activo está ayudando, de manera «importante», pero «no es suficiente». El responsable del gobierno autonómico apunta que no es un problema exclusivo del primer nivel, sino que se extiende como una mancha de aceite hasta un total de 17 especialidades. No en vano, entre Especializada y Primaria 3.500 profesionales colgarán la bata, sin contar que otros 1.600-1.700 enfermeros, piedra angular de la Atención Primaria y de estrategias como la atención a la cronicidad, dejarán paso a unas nuevas generaciones que no llegan y se van a necesitar en mayor grado.
Los problemas planean sobre especialidades como Anestesiología y Reanimación; Radiología, Urogología, con tasas más bajas de lo normal en la comunidad, que empieza a tener «ciertos problemas» también en Ginecología y Dermatología, donde «no hay tasa de reposición o bien es justa, de uno a uno».
Las necesidades hacen que el consejero defienda una planificación de recursos en todo el país. «Vuelvo a lo mismo, la planificación de los recursos sanitarios del Sistema Nacional de Salud. Vamos dando pasos, pero realmente los pasos que da una comunidad autónoma no garantizan la resolución del problema ». «Eso hay que discutirlo a nivel central», reitera el consejero de Sanidad, para volver a pedir una convocatoria extraordinaria e «histórica» para MIR de Medicina de Familia. «Es deseable e imprescindible».
«Cuando tienes un problema, en este caso tienes un grave problema de médicos de Medicina de Familia a nivel nacional, hay que poner todos los medios, hay que poner todos los recursos. Hay que utilizar al máximo todas las capacidades docentes de todas las comunidades autónomas y volver a sacar una convocatoria».
Vázquez reivindica llevar este punto al pleno de Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, al igual que en su día solicitó relajar las condiciones de acreditación de ciertas unidades docentes, por ejemplo las rurales, que exigen en este momento tener cuatro tutores.
Mientras llega una solución nacional para el sistema, porque «poner en una Comunidad es quitar de otra», Vázquez defiende medidas de choque como el plan de fidelización de Médicos Internos Residentes, que ha permitido incorporar este año a 263 especialistas, con contratos de tres años, frente a las 74 las plazas adjudicadas hace un año, y, además, con 50 especialistas que se han formado en otras comunidades autónomas y han elegido trabajar en la comunidad.
«Hemos puesto a disposición del Ministerio todas las plazas que tenemos acreditadas, concretamente en Medicina, Familia y Comunitaria, hemos puesto el 100%. También hemos pedido al Ministerio que quitaran la nota de corte», pero «no se ha hecho ningún caso». «Ha mejorado esa nota de corte, pero no la ha quitado». Con lo cual, este año ha habido más de 130 plazas, 140 plazas de Medicina Familiar y Comunitaria de MIR que no se han cubierto», lamenta el consejero de Sanidad.