Los empresarios advierten sobre la ralentización en la creación de empleo
Julio deja en la provincia 72 parados menos, aunque suma 1.203 afiliados más en un mes
Los empresarios leoneses advierten de la desaceleración en el ritmo de creación de empleo que se está produciendo a nivel general, y que incide directamente en las cifras de la provincia. La cifra de parados se redujo el mes pasado en la provincia en 72 personas (acumula una caída anual de 1.757); mientras que la afiliación creció en 1.203 (y deja el cómputo de los últimos doce meses en 2.591 trabajadores más). Sin embargo son cifras poco significativas para un mes tradicionalmente dinámico en el empleo como julio, con el impulso de la actividad turística.
Desde el Círculo Empresarial Leonés (CEL) se advierte de que el ritmo de creación de empleo decae en la provincia, y «pierde fuerza a medida que pasan los meses. Lo que no ofrece señales claras para pensar que en la segunda parte del año podremos mantener el mismo dinamismo en el mercado de trabajo».
Para la Federación Leonesa de Empresarios (Fele) los datos «ponen de manifiesto la voluntad y el compromiso de las empresas para impulsar la actividad económica y el empleo, a pesar de que se aprecie una cercana desaceleración a medida que finalice el verano y sea patente el impacto de la política monetaria restrictiva y la elevada inflación en el consumo y la inversión de familias y empresas».
Los datos del Servicio Público de Empleo (Sepe) cifran el número de parados registrados en la provincia en 21.449, mientras que los datos del Gobierno cierran julio con 167.736 afiliados en la provincia.
Desde el CEL apuntan que «la posibilidad de que se contraiga el consumo de los hogares, unido a la persistente inflación, las subidas de los tipos de interés y la incertidumbre política, no son buenos compañeros de viaje para que la economía y la actividad empresarial sigan manteniendo el buen pulso que han demostrado a lo largo de los últimos meses». Añaden también que si se añade «la presión fiscal excesiva, la burocracia innecesaria, la ausencia de perfiles profesionales adaptados o los problemas estructuras que arrastra la provincia, como los demográficos que se manifiestan en la reducción de la población activa, las dificultades aumentan para que las empresas puedan seguir acometiendo nuevos proyectos que generen oportunidades de trabajo».
También la Fele insta al gobierno que se forme a «tomar acciones que favorezcan la estabilidad y seguridad, como rebajas en las cotizaciones sociales, estímulos fiscales, contención del gasto público e impulso del Diálogo Social, entre otras».
El consejero de Industria, Comercio y Empleo, Mariano Veganzones, avisó ayer de que en Castilla y León «se puede estar iniciando un ciclo bajista laboral anual. Tenemos unos condicionantes económicos como la caída de la productividad o el incremento del coste laboral unitario que hace que estén influyendo notablemente en la evolución del mercado laboral», señaló el consejero.
Por su parte la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, celebró los datos de empleo del mes de julio y aseguró que el avance de la afiliación y la reducción del paro registrado «evidencian la estabilidad en el empleo». «Estamos por debajo de los tres millones (de desempleados)», una cifra que es «muy positiva» en tanto que «desde 2008 no teníamos unos niveles de paro semejantes».