Había casos anteriores
Ya había precedentes de ataques de la misma etiología antes del que el 5 de abril de 2022 acabó con la vida de la joven asturiana. Postolache había sido denunciado por otras mujeres por ataque similares, aunque ninguno tan especialmente violento como el que se conoció en la primavera del año 2022.
Con todo, se había decretado la prisión permanente revisable para Postolache, en su condición de asesino confeso de la pequeña, después de haber reconocido los hechos en una confesión firmada que sirvió para cerrar el caso que ahora termina de forma inesperada para los funcionarios de la prisión de Villahierro que se encargaban del asunto.