No menos de 7.000 juicios están en el aire de aquí a final de año
Al ritmo de trabajo normal y en una previsión realizada a primera vista, hay no menos de 7.000 juicios pendientes de aquí a final de año que no tienen certeza de celebración por culpa de la situación.
Los decanos de los colegios de la Abogacía, Fernando Rodríguez Santocildes y de los Procuradores, María Encina Martínez, lamentan en vano las consecuencias de la situación para los profesionales. Santocildes considera que la situación «es insostenible»; La paralización es «prácticamente absoluta de la actividad judicial. Se están provocando «perjuicios irreparables en la profesión y será muy difícil que se llegue a recuperar una cierta normalidad».
Hay una reflexión común de los dos colectivos afectados: «A nadie se le puede negar el ejercicio del derecho de huelga, pero ello no puede conllevar, durante meses, la paralización, y el bloqueo del normal funcionamiento de un poder del Estado, el Poder Judicial, y con ello la clara vulneración del derecho a la tutela judicial efectiva de la ciudadanía», dice el decano.
LEGÍTIMO PERO MUY CARO
«Las reclamaciones salariales son legítimas pero su reivindicación está suponiendo un elevado coste para la ciudadanía y para unos profesionales que no son quienes tienen en su mano la solución del conflicto».
El decano de la Abogacía de León pone en valor la actuación de una abogacía, que, sin embargo, y a pesar del deterioro constante de las condiciones en las que trabaja y las remuneraciones indignas y vergonzantes que perciben los profesionales del turno de oficio, no ha cesado ni un solo día de prestar el mejor servicio profesional a la ciudadanía, con profesionales altamente cualificados y con una formación cada vez más especializada».
En los mismos términos se encuentra el colectivo de los procuradores de la provincia, que encabeza María Encina Martínez como decana de los miembros de la procura. Para ellos el panorama es idéntico y las posibilidades de una solución parecen estar alejadas.