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La corona de la reina de León no era de espinas

La Virgen del Mercado encuentra la aclamación popular en la ceremonia de imposición de la nueva aureola canónica, posteriormente procesionada por todo el pueblo leonés de regreso a la iglesia de la plaza del Grano

Coro de la Catedral de León. J. NOTARIO

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León

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La Virgen del Mercado fue coronada de forma canónica en la Catedral, en un acto de extraordinaria asistencia de público y fervor popular, cerrado con una procesión posterior.

El obispo de León, Luis Ángel de Las Heras, ofició la Eucaristía, en la que agradeció el día «que dedicamos a la Virgen del Mercado, Antigua del Camino» con la Seo abarrotada de público.

El alcalde de la capital, José Antonio Diez, pronunció el salmo responsorial. La lectura principal refirió el pasaje de la Anunciación a la Virgen. En la homilía, el obispo anunció la llegada del gran día. «León hoy es más Leon por la fe que nos alegra en este valle de lágrimas. Coronamos a la Virgen de lágrimas y sonrisas, como reina y madre», dijo el obispo.

PUEBLO EN GUERRA

«La virgen es la joven doncella que hace posible que Dios sea carne pese a la guerra de Israel. Dios construye un pueblo de reyes «, dijo De las Heras.

«La Morenica resplandece en la plaza del Grano», señaló. «Estamos decididos a respetar el don de la vida humana. Leon será más Leon desde hoy si lucha por la paz con la Señora del Mercado». En El Mercado «tienes a quienes querrán venerar tu imagen con cariño. Miles de cristianos se han alegrado y sienten confiados que La Morenica es la Señora del Vienes de Dolores y ruega por nosotros como solo tú sabes hacer «.

A continuación Emilio Beltrán y Gonzalo F. Cayón colocaron la escala para proceder a la coronación canónica de la Virgen, con las madrinas de los dos conventos cercanos a la parroquia. En presencia de todas las autoridades de la ciudad, fue coronada la Madre Leonesa.

Fue el propio obispo quien colocó la corona, 38 minutos después de las siete de la tarde. Una cerrada ovación acompañó el momento, con casi un minuto de aplausos y un grito espontáneo: «¡Viva la Virgen del Pueblo de León!», surgido de entre la feligresía. La Capilla de Música «Catedral de León’‘ fue el sensacional coro adecuado para el sonido limpio del órgano de la Catedral, sólo interrumpido por los lloros de algunos bebés.

Especialmente seguido fue el acto de la Comunión. Se prolongó por espacio de casi un cuarto de hora. La interpretación del himno a la Virgen cerró el acto antes de comenzar la procesión. Otra ovación puso fin a la liturgia. Posteriormente se desarrolló la procesión. En General Lafuente y de forma testimonial, un grupo de mujeres pujó una tirada. El paso ha sido tradicionalmente pujado solo por hombres.

HISTORIA

Nadie lo explicó como Victoriano Crémer: «Todos los años, la Virgen de mi Calle, se asoma a esa magnífica geografía humana, contenida en calles y plazas y callejas que tienen nombres permanentes: Carbajalas, Santa Cruz, Misericordia, Rúa, Herreros (…) Ésta es de esas imágenes, de esas representaciones, de esos símbolos, de esas procesiones que van siempre por dentro…’

Y Cayón Waldaliso, lo expresa de este modo: ‘Nuestra ciudad, conocedora de la bellísima historia y tradición de la Dolorosa (…) se volcará en esta piadosa manifestación de fe mariana en torno a la sacratísima imagen de la ‘Morenica del Mercado’ (…) Hoy, las miradas de los leoneses serán todas para la milagrosa imagen, que recibirá en nuestras calles la emotiva escolta de millares de mujeres leonesas’.

El 9 de febrero del año 560 se admite como fecha en que La Virgen se apareció a un pastor en el lugar donde se alza ahora una cruz de piedra en la Plaza del Grano. Abona la referencia un legajo de 1663. En la sacristía del templo parroquial un fresco recoge la escena. De lo que antecede se desprende que La Morenica del Mercado concentra devociones y fervores desde tiempos inmemoriales, según explica Máximo Cayón Diéguez.

SIN FISURAS

En consecuencia, puede afirmarse, sin ninguna duda, que la devoción que ha depositado, y deposita, el pueblo de León en ‘la Antigua del Camino’ desconoce mengua, fisura o menoscabo. Y, por supuesto, la feligresía en pleno. La cosa no es de ayer. Siempre fue así. Por ello, acaso haya aflorado con tanta fuerza en el alma popular ese deseo ferviente y manifiesto de que esta ‘Sacristísima Imagen’, denominada así por numerosos documentos parroquiales, sea declarada oficialmente Patrona de la ciudad de León.

NOVENARIO

Cada Viernes de Dolores, finalizados los actos litúrgicos del último día del novenario, que se lleva a término con una intención especial: la paz del mundo, a la vera del Camino Francés, al atardecer, concretamente, a las ocho de la tarde, en la iglesia de Nuestra Señora del Mercado y del Camino, la Antigua de León, comienza la Semana Santa de esta capital del Viejo Reino, una estampa secular que, como quedó dicho al principio, hacen posible el pulso de la fe y el latido de los siglos.

Como si de un Viernes de Dolores más se tratase, ayer de manga corta y con más gentío que nunca, la Virgen tomó la calle y se hizo dueña del pulso de León. Todo para dar luz a la noche ya cerrada en la capital, donde la madre compartió espacio con los últimos efluvios del Monoloco, con los estertores finales del Día de las Peñas, con los vaivenes de las oleadas de público disfrutando de las actividades de las fiestas de San Froilán, los espectadores del Mercado Medieval y centenares de propuestas alternativas que difuminaron en parte un acontecimiento que podría haber sido aún más histórico.

ACCIÓN DE GRACIAS

Hoy se celebrará la Misa de Acción de Gracias, con un ejercicio de agradecimiento del pueblo leonés hacia la Madre del Merado por los favores prestados al pueblo de la Región Leonesa en su versión más ferovorosa y dedicada a la Pasión fuera del calenadrio.