El centro de menores enfrenta despidos y nuevos contratos con la ocupación al máximo

El centro de menores Suero de Quiñones, único dependiente de la Junta que mantiene su actividad en León, enfrenta un conflictivo proceso de despidos y nuevas contrataciones justo cuando su capacidad de ocupación está al máximo. En total 22 menores en situación de vulnerabilidad reciben atención en esta residencia, cuya ocupación en los últimos años se había reducido hasta menos de cinco usuarios, lo que en 2021 llevó a los sindicatos a alertar contra la amenaza de desaparición de este servicio público. Poco antes se había dado el cerrojazo al Centro de Acogida del Alba. 

Este martes el sector de Administración Autonómica de UGT denunció que en noviembre se despedirá a varios trabajadores eventuales de los 14 con los que cuenta el centro, sólo dos de ellos fijos. El convenio colectivo que entró en vigor el 1 de julio cambia las categorías profesionales de educador, responsable nocturno de internado y técnicos de atención al menor en una nueva categoría, técnico del menor. En Suero de Quiñones hay actualmente ocho educadores (dos de ellos fijos y uno próximo a la jubilación), dos responsables nocturnos y cuatro técnicos.  

Según explicó la secretaria del sector, Ruth Sanz, «es inconcebible que el centro nos sorprenda ahora con despidos a cuenta del cambio en los modelos de gestión de los centros de menores». Según el sindicato, la nueva organización determina que los puestos sean ocupados «con denominaciones específicas y nuevas titulaciones adecuadas a los ciclos formativos actuales. Una tarea en la que la Junta ya va tarde». Y que, denuncia el sindicato, implicará que personas que llevan muchos años trabajando en el centro sean despedidas e indemnizadas, mientras se preparan ya los nuevos contratos. «En varios casos serán ocupados seguramente por las mismas personas por el proceso de estabilización». 

22 menores atendidos

Desde la Gerencia de Servicios Sociales de León señalaron este martes que actualmente son 22 los usuarios del centro, que se encuentra al completo de su capacidad. Matizaron también que la cifra de menores atendidos por el servicio público es «muy variable, dependiendo del momento». 

Respecto a los despidos, insistieron en que «de momento no se ha notificado ninguno»; y señalaron que la modificación de plazas se realiza de acuerdo con el nuevo convenio colectivo pactado y firmado con los sindicatos. «Traerá cambios, pero ha sido pactado», apuntaron desde la Delegación Territorial. Sin embargo, UGT señala que dos trabajadores eventuales acaban de recibir la notificación.

El sindicato advierte de que esta situación de despidos en los centros de menores no afecta sólo al de León, sino a todos los de la Comunidad. 

Ruth Sanz recuerda que se negoció el nuevo convenio, «pero nunca se habló de que eso implicara despidos». Y recuerda que ya cuando se cerró el centro El Alba los sindicatos advirtieron contra «la «amenaza de privatización de estos centros. La Junta no captaba a menores, sólo los dirigía a la Cruz Roja, las monjas,... Ahora han llegado los usuarios a los centros, pero el tema de personal es un despropósito». 

El centro de menores atiende a los niños y adolescentes que tienen problemas para estar con sus padres en casa por distintas situaciones, los pequeños en riesgo y situación de vulnerabilidad,... «También tienen como objetivo a los menores extranjeros no acompañados (menas), aunque en León no hay actualmente casos de este tipo». En Suero de Quiñones tienen educadores que les apoyan para estudiar y realizar tareas, educación fuera del ámbito familiar, acompañamiento, médicos. «Es una labor fundamental para menores en riesgo de exclusión social», concluye la representante de UGT.