Los trastornos mentales crecen entre los médicos

Casi 240 médicos de Castilla y León han recurrido al programa de Atención Integral del Médico Enfermo (Paime) , un servicio para facilitar a los facultativos el acceso a una atención sanitaria de calidad y especializada en enfermedades relacionadas con trastornos psíquicos y/o conductas adictivas que puedan interferir en su práctica profesional . «Los médicos, al igual que el resto de la población, padecen enfermedades que deben ser diagnosticadas y tratadas y necesitan una atención específica y personalizada cuando existan problemas de alcoholismo o dependencias a otras drogas», explica el presidente del Colegio de Médicos, José Luis Díaz Villarig. 

Los médicos de familia son los que más recurren a este programa. Un 84% de los 1.711 médicos atendidos en toda España en el programa entre 2021 y 2022 tenían trastornos mentales, lo que supone un aumento respecto al estudio previo, mientras que bajan las consultas por problemas de alcoholismo (5,6 %), drogas (3%) y patología dual 5,5 %. 

Los problemas mentales son los que más aumentan y han pasado de representar el 59,9% en el año 2011 al 86,4% en la actualidad.  Dentro de los trastornos mentales, el 27% corresponden con problemas adaptativos, el 24% con los estados de ánimo, un 21% presenta problemas de ansiedad, un 12% están vinculados al consumo de alcohol y otras drogas, un 5% a los trastornos de personalidad y un 3% a esquizofrenias y otros problemas psicóticos. 

Los profesionales de la especialidad médica que más necesitan recurrir a este programa son los de medicina familiar y comunitaria (44.5%), seguidos de pediatría (6,3%), psiquiatría (5,2%), medicina interna (4,8%), anestesia (4,5%), urgencias (3,1%), ginecología (2,4%), traumatología (2,1%) y cirugía general (1,7%).

Otro dato llamativo del informe es que la mayoría de los médicos que recurren al programa proceden del entorno urbano, que representan el 87% de los atendidos, y el 13% son médicos que atienden en el medio rural.

También han aumentado los casos complicados, es decir, los que tienen riesgo de mala praxis, provocan conflictos laborales o necesitan cambiar de puesto de trabajo. En cuanto a los casos que necesitaron ingreso hospitalario — el 27 %, frente al 19,4 % anterior—, un 18 % fueron considerados casos complejos (16 % en el período previo). De ellos, un 56 % tenían riesgo para la praxis.

En Castilla y León se han atendido 67 médicos en este mismo periodo de dos años, de un total de 16.177 colegiados, con un salto cuantitativo en 2022, con 38 galenos que necesitaron ayuda especializada, nueve más que el año anterior.

Desde el inicio del programa , hace 25 años, han sido atendidos 8.083 médicos por trastorno mental y adicciones, de los que más de un 90% se han recuperado e incorporado al ejercicio de la medicina. El centro de referencia para las hospitalazariones es la clínica Galatea, que está en Barcelona, centro en el que se han ingresado a más del 86,7%  (98 pacientes) de los facultativos que necesitan una vigilancia hospitalaria. La media de estancia es de 50 días.

Según los datos recogidos por la Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC), en los dos últimos años se han atendido un 40% más de casos que en el período 2020-2021, en los que hubo una media de atenciones de 500 médicos al año, frente a los 850 del último informe. Además, en los últimos cinco años se ha duplicado la petición de asistencias. 

Más mujeres

Un 65 % de los afectados por problemas de salud mental y adicciones son mujeres, frente al 3 % de hombres, lo que confirma la tendencia ascendente de los últimos años. La vicepresidenta primera del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) y la Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC), María Isabel Moya, explicó este jueves en la rueda de prensa en la que se presentó el informe, que  el aumento de los casos atendidos se deben  a «su mayor vulnerabilidad», a la dificultad para compatibilizar el ejercicio de la profesión con el cuidado de hijos o familiares, y a que son más propensas a consultar que los varones.

El tramo de edad con mayor número de casos es el de entre 31 y 40 años (22,2% en 2022 y 24,4% en 2021), mientras que en 2019 era del 20,8 %.

El presidente del consejo, Tomás Cobo, precisó que «hay mayor cantidad de mujeres en esa franja de edad». Pediatría y Psiquiatría, especialidades más vulnerables

Un 86 % de los médicos que pidieron ayuda trabajaban en la medicina pública, frente al 105 que lo hacía en la privada y un 4% en ambos».

Según Cobo, los trastornos mentales de los médicos son producidos por «el choque de trenes entre la demanda social de la atención y lo que son capaces de aportar», en un sistema que «está muy mal», a juicio del presidente del Consejo de Médicos del País Vasco, Cosme Naveda.

Por ello, anunció  que durante el próximo congreso del Paime (Bilbao -9, 10, y 11 de noviembre) se abogará por potenciar y promover todos los programas de la atención mental de la mano del Ministerio de Sanidad y de las consejerías.

El informe presentado este jueves concluye que el  aumento del número de nuevos casos atendidos en el Paime, hace necesario actuar en la promoción, protección y prevención de la salud mental de los médicos desde las facultades de medicina, y detectar y corregir los riesgos psicosociales a los que se enfrenta la profesión médica.

«La demanda de solicitud del Paime supera lo esperado respecto a la proporción de colegiados, entre las mujeres médicas, los menores de 30 años y los médicos de familia y medicina general. Por eso hay que aplicar perspectiva de género a las nuevas estrategias».

El 58,7% pide ayuda por iniciativa propia

Muchos médicos enfermos no son conscientes de sus problemas y se resisten a recibir apoyo o ayuda. Otros médicos enfermos, conscientes de sus problemas, hacen grandes esfuerzos para limitar sus deficiencias.

En ambas situaciones, si el médico sigue ejerciendo sin recurrir a la asistencia de un profesional especialista, normalmente sólo es cuestión de tiempo que empiecen a surgir serios problemas .

De hecho, 58,6 % de las personas atendidas recurre al programa por iniciativa propia, el 16% de los casos son derivados al programa por el psiquiatra, otro, 12,1% por otros colegas,  un 5% por un superior, un 3,7% por un familiar y un 3,2% por riesgos laborales. 

El Consejo de Colegio de Médicos de Castilla y León tiene un convenio con la Consejería de Sanidad para atender de forma privada a los médicos.