León grita por las que no pueden gritar
La campa de la Universidad acoge la lectura del manifiesto contra la violencia hacia mujer en la que han participado las instituciones y los niños del colegio de La Palomera
Gritar por las que no pueden hacerlo, por las que tienen miedo, por las que están condicionadas, por las que no saben qué tienen ayuda para poder hacerlo. León y sus instituciones, los jóvenes y los niños han dado un paso al frente en la campa de la Universidad, mientras en la cafetería sonaba de fondo la canción de Rozalén que se ha convertido en todo un himno contra la violencia contra la mujer.
Con motivo del 25-N, declarado como día internacional contra la violencia contra la mujer, los niños de sexto de Primaria de La Palomera han arropado a los representantes institucionales que han leído un manifiesto conjunto hilado por Miriam, una educadora social, que ha puesto el foco en la necesidad de esa “cadena intergenarional” para conseguir “medidas efectivas” para frenar la violencia que se ejerce sobre mujeres y niñas por el mero hecho de serlo.
El rector de la Universidad, Juan Francisco García Marín, ha reclamado a la sociedad ser “proactiva y trabajar en soluciones eficaces”, tras recordar que el 50% de los jóvenes no considera que existe un problema con la violencia contra las mujeres.
“Hay que promover el liderazgo de las mujeres como agentes de cambio”, ha dicho el alcalde, José Antonio Diez, mientras que la vicepresidenta de la Diputación, Ana Arias, demanda “estrategias eficaces” que también lleguen al medio rural donde “permanecen códigos sexistas ocultos”.
“ hay que invertir en formación, tiempo y dinero, se necesita capacitación y crear entornos seguros”, ha dicho el delegado de la Junta, Eduardo Diego, porque “los niños educados en la igualdad se sobrepondrán con su ejemplo”. Por su parte, el subdelegado del Gobierno, Fáustino Sánchez, ha abogado por los recursos humanos y económicos y “centrarse en las víctimas”, sin olvidar “a víctimas de violencia psicológica” que son menos visibles.
Tres alumnas del colegio de La Palomera dieron voz a todos sus compañeros para exigir “plantar cara “ a la violencia contra las mujeres porque “no tiene ninguna justificación y atenta contra los derechos humanos”.
Desde la Universidad también se posicionaron los alumnos, David González y María Jesús Carrizo, está última del programa de la Universidad de la Experiencia. Ambos recordaron la lucha y el silencio y también “el aguante” de las generaciones de madres y abuelas para “no apartar la mirada” y “seguir en el camino” ya trazado para mejorar y mantener los logros en el objetivo de conseguir la tolerancia cero.
El encuentro ha concluido con la lectura de los nombres de las 52 mujeres que han sido asesinadas en lo que va de año. “Un número muy alto”, como han precisado Martín Cañón y sus compañeros de la clase de sexto A que han lanzado un mensaje claro: “ Hay respetar a las mujeres, todos somos iguales y tenemos los mismos derechos “.