El desahogo de Manuel García tras quedar libre de La Enredadera

Villaquilambre ha celebrado este martes el pleno del desahogo del exalcalde popular Manuel García. Una sesión donde el concejal del PP dio cuenta del archivo de todas las acusaciones contra él en la conocida como trama Enredadera.

El político quiso sacar pecho al liberarse de toda responsabilidad en aquel asunto que arrancó con 40 policías a la puerta de su casa el 3 de julio de 2018, que derivó en un pleno explicativo el 16 de agosto de aquel año y culminó con una moción de censura donde sus socios (UPyD y UPL) apoyaron al PSOE, junto con Podemos, para desbancarle del sillón de mando del municipio.

"Han sido cinco años durísimos, con un daño moral y para mi familia irreparable, además de las consecuencias políticas que supuso y la presión enorme a la que se me sometió", indicó al plenario.

García repasó los "sentimos vergüenza" que escuchó de alguno de sus exsocios de Gobierno, y el "pedimos la dimisión inmediata independientemente del resultado de la investigacion policial" o la "telenovela triste que vive este ayuntamiento".

También recriminó que el PSOE le esperara su disgusto "por trabajar de comercial para otros en vez de para los vecinos", frases que le marcaron y que hoy cree fueron injustas porque una sentencia deja claro que él no estuvo implicado en nada.

Manuel García, en un monólogo, advirtió a la actual Corporación que como concejales o alcalde pueden "llegar a encontrarse con una situación similar" y espera que "no se vean" en algo similar a lo que él ha vivido.

También remarcó que pese a los sinsabores se queda "con la sentencia y con que no tuve ni que ir a declarar".

La concejala de Podemos, Rita González, fue la única del equipo de Gobierno que intervino para decirle que "entiendo que vivió una situación delicada y dura, pero no creo que fuéramos los responsables".