Piden 10 años al acusado del atropello mortal de un varón y su perro en San Andrés
Los hechos ocurrieron en octubre de 2022 en Corpus Christi con un coche robado que se dio a la fuga
Lugar de la calle Corpus Christi de San Andrés donde se produjo el atropello. RAMIRO
El juzgado de los Penal número 2 de León ha dejado visto para sentencia el atropello mortal ocurrido el 17 de octubre de 2022 en la calle Corpus Christi de San Andrés del Rabanedo, cuando un hombre mayor paseaba con sus dos perros al filo de las cuatro de la tarde y fue embestido por la espalda por un automóvil que le causó lesiones de tal calibre que le causaron la muere, al igual que a una de las dos mascotas que le acompañaban.
El acusado, un joven de nacionalidad brasileña criado en Galicia, se enfrenta a peticiones de 8 a 10 años de cárcel según determine el juez si el atropello fue un homicidio imprudente o doloso tras valorar las pruebas y los testimonios aportados en la vista oral.
Se da la circunstancia de que el vehículo con el que fue atropellado mortalmente el vecino de San Andrés del Rabanedo había sido robado esa misma mañana a las puertas de un taller de reparaciones del Crucero en la calle Antonio Nebrija, donde el dueño lo había estacionado momentáneamente con las llaves puestas para hablar con los responsables de su reparación.
Buscó una coartada
Abandonó el turismo tras limpiar huellas, se cambió de ropa y sustrajo un perro para caminar con él
La investigación también determinó que el acusado huyó del lugar tras el incidente y no sólo abandonó el turismo en las inmediaciones del cementerio local, sino que intentó borrar las huellas del interior del automóvil, se cambió de ropa y sustrajo un perro de una finca colindante para pasear con él en busca de una coartada, según determinó la Policía Nacional.
Los agentes de San Andrés lograron detenerle días después tras examinar junto a expertos de la Comisaría General de Policía Científica el vehículo y encontrar ADN en la placa de la matrícula que el sospechoso había intentado desdoblar tras el golpe y en el cinturón de seguridad, entre otros.
Fue un trabajo exhaustivo de 10 horas para exprimir todas las pistas que pudieran encontrarse en el Peugeot. El hombre atropellado era muy conocido en el municipio. Residía en los chalés de las inmediaciones del bar La Terraza y solía tomar café a diario en el bar Gijón de Trobajo del Camino. Estaba viudo. La investigación de la Policía Judicial de San Andrés también incluyó imágenes de cámaras de seguridad y numerosos testimonios que reflejan que el vehículo se subió a la acera, esquivó unos bolardos y siguió en línea recta en la trayectoria que caminaba el varón al que finalmente atropelló. El acusado posee numerosos antecedentes policiales, entre ellos, delitos patrimoniales, por participar en reyertas y relacionadas con estupefacientes. De forma itinerante viajaba por toda España, frecuentemente armado.