El consejero exige un Interterritorial monotemático del déficit de personal
«La Fiscalía del Estado está en su ámbito y yo tengo que estar en el mío, que es el de garantizar la asistencia sanitaria». De este modo salió al paso ayer el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquz, a la respuesta emitida por el Ministerio de Sanidad al procurador Francisco Igea, sobre la contratación de médicos sin especialidad para ejercer en Medicina de Familia, que indica que cuenta con un informe de la Abogacía del Estado, que ha sido ratificado por la Abogacía General, que recoge la exigencia del título de Medicina de Familiar y Comunitaria para ejercer.
El consejero insistió en que la contratación de 235 profesionales sin especialidad en Sacyl responde a la necesidad de mantener la asistencia sanitaria, algo que han hecho todas las comunidades autónomas, incluso en tiempos precovid, desde Andalucía a Cataluña, pasando por Navarra y País Vasco. Mantuvo que respeta su labor, pero que la suya «es hacer todo lo posible» para garantizar la prestación a la población.
Vázquez realizó estas declaraciones tras la reunión extraordinaria del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), tras la que volvió a pedir a la ministra del ramo, Mónica García, la convocatoria de un pleno para afrontar el «grave problema» del déficit de profesionales. «Queda meridianamente claro, al no haberlo convocado, que el Ministerio no tiene ningún interés» en abordar la falta de profesionales, cuando «dijo en sus primeras palabras que se iba a encargar de nutrir especialistas». Cree que «se ha perdido una oportunidad. Tendríamos un sistema más robusto en estas circunstancias», sentenció, para recordar que desde el 21 de diciembre, último Interterritorial, nadie se ha puesto en contacto con los responsables de la consejería para conocer la situación epidemiológica y de presión.