Diez silencia la Mesa del Ruido pese al clamor del Húmedo
El PP reclama que se convoque este órgano después de cuatro años
Después de cuatro años desde la convocatoria de la última reunión y con los vecinos levantados en armas para exigir el cumplimiento de la normativa, el PP censuró ayer la decisión del alcalde, José Antonio Diez, de mantener desde hace cuatro años sin citar la Mesa del Ruido. No ha habido ni una reunión, como incidieron los populares, que interpretan la actitud como un gesto de «censura de las denuncias vecinales del casco histórico.
Los populares expusieron en que se trata de «un nuevo ejemplo de la manera de gobernar de forma unilateral y sin diálogo de un equipo en minoría, como es el PSOE municipal de Diez». La «falta de capacidad para gestionar y dirigir las diferentes áreas municipales de la ciudad aumenta día a día», como incidió la concejala popular Ana Franco, quien abundó en que «las carencias las del alcalde, José Antonio Diez, y sus concejales, afectan a asuntos fundamentales, como los problemas acústicos del municipio».
Franco recordó que Diez «no convoca la Mesa del Ruido desde hace cuatro años, en noviembre de 2019, a pesar de que estas reuniones son al menos anuales», y que el PSOE exigía «con vehemencia en la oposición». Sin la convocatoria de esta mesa, «formada por concejales, técnicos municipales, de la Junta y la Universidad, representantes vecinales y hosteleros, así como por miembros de la Policía Local, no se han debatido ni solucionado los asuntos que preocupan a los leoneses».
La Mesa del Ruido, como explicó Franco, tiene como función «dirimir de forma democrática problemas de convivencia entre vecinos y locales de hostelería, reclamaciones y planteamiento de posibles soluciones a los problemas acústicos y de suciedad derivados sobre todo del horario tardío de cierre y falta de cerramientos y aislamientos adecuados en locales musicales», además de que guía «el estudio de la Zona Acústicamente Saturada, que derivó en la prohibición de abrir nuevos locales, y de las Zonas de Respeto».
Con esta argumentación, la edil del PP reclamó «la inmediata convocatoria de la Mesa del Ruido en aras de la mejora de la convivencia en el casco antiguo». Franco propuso que se aproveche este órgano además para recabar «reclamaciones de partes implicadas y se informe a los colectivos afectados de las medidas a tomar, en este caso concreto en la redacción de la nueva ordenanza municipal de terrazas».