Scayle se prepara para sumar 235 nuevos servidores y multiplicar por 10 su capacidad

El Centro de Supercomputación de Castilla y León, Scayle, prepara una «intervención programada» para activar los 235 nuevos servidores, que ya tiene en sus instalaciones y que una vez completada la operación multiplicarán por diez la capacidad de cálculo de Caléndula. Los equipos llegaron a finales de 2023 al centro, si bien ahora será necesario seguir el procedimiento que requiere su instalación. Para ello, la Consejería de Movilidad y Transformación Digital ejecuta una inversión de 6,22 millones de euros, financiados con Fondos Europeos.

Scayle tiene en marcha en este 2024, la ampliación del superordenador a través del contrato adjudicado a Lenovo Spain, que prevé incorporar 235 nuevos servidores con los que se potenciará el entrenamiento de las redes neuronales artificiales y los sistemas de inteligencia artificial generativa, al incrementar el número de operaciones posibles por segundo hasta los 800 millones de millones (8.000 TeraFlops). Asimismo, esos servidores también permitirán aumentar de forma notable la capacidad de memoria RAM, lo cual es especialmente relevante para las investigaciones genómicas que desarrollan diferentes grupos de investigación para avanzar en la medicina personalizada.

En cuanto a los proyectos en los que trabaja, acaba de iniciar uno con la Universidad de León para investigar en nuevas tecnologías e impulsar la industria nacional de soluciones autónomas robóticas, que dispone de una ayuda de 4,57 millones, con algo más de medio millón para Scayle. También está embarcado en la creación de un centro nacional de servicios de supercomputación, Big Data e IA junto a 33 socios, además de trabajar en una plataforma de orquestación de redes de señuelos o en el cifrado y notario digital resistente a los ataques cuánticos.