Un fuego destruye una casa en Valseco tras sorprender a sus moradoras mientras dormían
La hija se despertó por el humo y sacó a su madre a la calle con la cabeza envuelta en una toalla; después gritó para alertar a los vecinos y tocaron las campanas. El Ayuntamiento de Palacios ya les ha ofrecido una vivienda.
Entre la una y la dos de la madrugada. Nadie sabe la hora exacta porque todos estaban durmiendo. De lo que sí son conscientes es de que la tragedia pudo haber sido muy grande. El fuego ha devorado una vivienda en el pueblo de Valseco (Palacios del Sil). Dentro estaban sus dos inquilinas, una madre octogenaria, Adoración, y su hija Natividad. Fue ella la que se dio cuenta de que la casa estaba en llamas y sacó a su madre de dentro con la cabeza envuelta en una toalla para ponerla a salvo en el coche. Después, empezó a gritar para alertar a los vecinos.
La vivienda está en la calle Real, la principal arteria de pueblo. Todos escucharon las voces y se echaron a la calle. Como se tiene por costumbre, se tocaron también las campanas. Así se extendió la alarma. Fueron los vecinos más jóvenes los primeros en intervenir con un equipo de mangueras adquirido por la Junta Vecinal y haciendo uso de la nueva red de bocas de incendio y una pequeña motobomba que tiene el Ayuntamiento. De no ser por eso, el fuego se hubiera extendido a las casas colindantes. Todas están pegadas. Hasta cinco.
Alrededor de 50 minutos tardaron en llegar al pueblo los bomberos de Villablino y dos horas después, se unieron los de Ponferrada. La labores de extinción duraron toda la noche y esta mañana siguen allí, enfriando el escenario, que no es otro que una casa de pueblo con mucha madera. Madera en toda la cubierta. Madera en la entreplanta. Madera que es presa fácil del fuego que ha destrozado todo. No queda para vivir ni nada dentro.
Adoración está convencida de que ella y su hija salvaron la vida de milagro, aunque fue la segunda quien, alertada por el humo, tuvo la determinación de actuar con rapidez. Tras las primeras horas de miedo, nervios y desesperación por la impotencia de no poder hacer nada; ahora hay que buscar soluciones y en eso han contado con el respaldo absoluto del Ayuntamiento de Palacios del Sil, que ya ha conseguido una casa para realojar a estas dos vecinas de Valseco.
El Ayuntamiento es propietario de dos viviendas, una de ellas de uso social; pero las dos están ocupadas en este momento. El alcalde, Roberto Fernández, se ha implicado de manera personal y ya puede poner a disposición de Adoración y Natividad un alojamiento rural municipal ubicado en Mataotero. Además, hay un fondo de contingencia que se tiene para estas ocasiones. Ya se hizo uso de él hace unos años ante el incendio de otra casa en Cuevas y, esta vez, la situación no será distinta. Las afectadas tendrán que decidir ahora si aceptan o no la propuesta o si se quedan en casa de algún familiar.
Si no llega a ser porque en Valseco todavía vive gente joven y por las mangueras del pueblo, la tragedia hubiera sido mucho mayor porque hay varias casas pegadas a la que ardió
Valseco es un pueblo de montaña localizado a casi 60 kilómetros de Ponferrada, que llevan como mínimo una hora de viaje, y a unos 25 kilómetros de Villablino. Con estas distancias y tiempos, sin medios municipales o propios de la pedanía hubiera sido imposible salvar todas las casas que lindan con la vivienda afectada. "Estaríamos hablando de una tragedia muchísimo mayor", asegura el alcalde. El suceso vuelve a poner de relieve la necesidad de dotar a los pueblos de los servicios necesarios para que puedan intervenir en caso de emergencia.