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León

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Conseguir la financiación de proyectos a través de la concurrencia competitiva tanto en el ámbito nacional como en el internacional es una de las iniciativas que ha desarrollado Cesefor. Y gracias a las cuales avanza en proyectos como Biovalor, que pretende impulsar la bioeconomía «a través del desarrollo de nuevas cadenas de valor en torno a una gestión forestal sostenible, y al cultivo de especies aromáticas autóctonas para la producción de aceites esenciales y subproductos de alto valor añadido». Se trata de «generar empleo verde y un nuevo tejido productivo en zonas despobladas, así como de aumentar la resiliencia de los ecosistemas forestales frente al cambio climático». Entre otras propuestas, se estudia el perfil químico y el potencial de mercado de los aceites esenciales y los subproductos de las aromáticas.

En la misma línea está el proyecto Esjara, que desarrolla la obtención de derivados de la jara, sobre todo aceites esenciales, a través de la gestión activa de los jarales. También valoriza el hidrolato de la destilación y la biomasa residual, para obteneer productos biocidas para uso agrícola y para fabricación de pellets y tableros de partículas.