«Me animé por ayudar dada la precariedad de profesionales y que me encuentro bien»
Tiene 66 años bien llevados. Pulmones cargados con el aire de las montañas leonesas, a las que es un gran aficionado, y venas por las que corre la medicina como vocación. Así que cuando recibió la llamada de la Gerencia de Atención Primaria proponiéndole sumarse a la nueva jubilación activa mejorada, José María Fernández García dijo sí. «Me animé por ayudar, dada la precariedad de profesionales que existe y para evitar acumulaciones. Además, me interesaba porque mentalmente me viene bien, no estaba muy convencido de irme para casa sin más, y física y emocionalmente me encuentro bien», indica.
Este médico explica que la medida de reengancharse con las nuevas opciones que da el gobierno «ha tenido muy buena cogida entre los compañeros», y no sólo la mayoría de los facultativos de familia que les tocaba jubilarse han decidido continuar gracias a este sistema, sino «que al menos dos que ya estaban jubilados y en su casa han optado por venir», matiza.
Tras su paso en 2015 por Cistierna y por José Aguado en la pandemia, su último destino fue Pinilla, donde sigue pasando consulta desde San Juan de Dios (por las obras del ambulatorio) y donde a priori continuará hasta 2025. «Se pueden estar tres años y cuando me den otro puesto ya valoraré cómo me encuentro y dónde me manda. Si es a La Cabrera o a Riaño, quizás, no esté para conducir tanto», admite. Cree que la receta para impulsar Atención Primaria debe tener como ingredientes más inversión, más médicos y más plazas. «Es una cuestión de hacer números, se sabe cuántos se jubilan y cuántos se necesitan. Fidelizar ya es cuestión organizativa y hay que ofrecer buenas condiciones para que vengan y se queden».
Con 1.300 cartillas a su cargo, reconoce que hay centros más sobresaturados que otros, aunque el principal problema es la «precariedad de compañeros». De ahí que quiera seguir arrimando el hombro. Ve «perfecto» el nuevo papel del colectivo enfermero con el triaje de casos en una primera valoración y pide menos burocracia.