Premio al control al polen, la solución al ruido y la bioenergía

El Consejo Social de la Universidad de León acaba de entregar sus premios de Transferencia de Resultados de Investigación, un certamen que busca “poner en valor el conocimiento generado en la Universidad de León para la sociedad”, como explica el presidente del Consejo Social, Javier Cepedano. La entrega de distinciones se enmarca en la presentación de la nueva convocatoria que cerrará el plazo para presentar las propuestas el próximo 23 de febrero.

La Red Aerobiológica de Castilla y León, un servicio de salud pública, en la categoría de Transferencia de Resultados de Investigación a la Sociedad; Bioenergía y desarrollo tecnológico, ha sido distinguido en Transferencia de Resultados de Investigación a la empresa y en la categoría de Transferencia de Resultados de Investigación en la categoría de reconocimiento a la empresa a Incosa, por el trabajo desarrollado, junto con el Laboratorio de Acústica de la institución académica en el impacto del ruido de los aeropuertos españoles han sido los galardonados.

Desde 2016, el grupo integrado por Delia Fernández González, Rosa María Valencia Barrera, María Rosa García Rogado, Sheila Díez Casado, Icíar Quintanilla Rodríguez y Alicia Armentia Medina trabajan con la Junta de Castilla y León y la Consejería de Sanidad para medir los niveles de polen en Castilla y León a través de 13 estaciones. A día de hoy son el grupo más grandes de aerobiología a nivel nacional y también europeo, con cerca de 9.000 muestreos realizados desde entonces. Su trabajo permite alertar a las personas que sufren alergias de posibles picos de polen, además de a los especialistas médicos para modificar o tratar a sus pacientes. “Cada vez hay más alérgicos”, explica Delia Fernández Casado tras recoger el galardón, que ha sido creado por la Unidad de Fabricación 3D de la propia institución académica.

El grupo integrado por Adrián Escapa González, Antonio Morán Palao, Xiomar Gómez Barrios, Raúl Mateos González y Fernando González Andrés colaboran activamente con diferentes empresas para abordar modelos basados en la economía circular y las renovables tanto en el tratamiento de aguas como de residuos. Su grupo de investigación, además, será uno de los primeros en integrarse en el instituto I4 que acaba de ser aprobado por la Junta y cuenta con más de 20 años de experiencia y ha sido pionero en algunas de las áreas que continúa desarrollando.

La empresa Incosa colabora desde2016 con el Laboratorio de Acústica de la Universidad de León para mejorar la calidad de vida de los vecinos que residen en áreas próximas a aeropuertos españoles a través de la medición de la contaminación acústica y el desarrollo de soluciones para esas viviendas. El director de Operaciones de Incosa recuerda que al empresa nació en León y que la Universidad de León es la “cantera de la empresa”.

Tanto Javier Cepedano como el rector de la Universidad de León, Juan Francisco García Marín, han destacado la importancia de la transferencia de conocimiento desde la institución académica a la sociedad. “La Universidad tiene que tener contacto con la sociedad, con el exterior, y dar visibilidad a todo lo que se hace. La transferencia crece cada año y así tiene que ser”, incide Marín.

Cepedano recuerda que desde que arrancaron los premios hace tres años ya se han presentado 40 trabajos, en unos galardones a los que el Consejo Social destina 8.000 euros.

Durante su intervención, el vicerrector de Investigación, Carlos Polanco, recuerda el reconocimiento recibido en la pasada edición de los Premios Innova de Diario de León a la red de investigación de la Universidad de León y ensalza el premio recibido por Samuel Álvarez García, quien el año pasado se alzó con el primer premio que entrega la Oficina Española de Patentes y Marcas por su dispositivo para evaluar la interacción entre plantas y microorganismo a través de conjuntos orgánicos volátiles.