El tren prepara el salto a la León-Astorga

El ramal de Villadangos se dispone a cerrar la senda más complicada que tiene para llegar desde el nudo de la vía León-Vigo al centro del polígono. Es el proyecto más ambicioso que ha acometido el sector industrial leonés para la memoria de la última generación, que no ha conocido más que pérdida de activos. Desde la pasada noche, se acomete en el entorno la penúltima actuación en la estructura, que supone calzar el vano del puente que cruza la autopista de León a Astorga. Se completa el proceso con el procedimiento de regulación del tráfico que se empleó para saltar la N-120. Para ello, es preciso llevar a cabo el corte de circulación en la autopista de peaje, entre las nueve de la noche y las seis de la mañana, con desvío de tráfico por la carretera nacional. El trecho afectado va del punto kilométrico cero al diez. Así, se repetirá cada noche, durante tres jornadas. Más tarde, a partir de la próxima semana, se repetirán los cortes, para rematar parte de la estructura que ya marca el horizonte de ese corredor central de León que lleva a la nacional con más densidad de tráfico, la autopista más cara y ahora, el tren esperado.