El corredor de Nocedo se completa con la peatonalización de Jovellanos

No parece un parque. Pero si se ve la perspectiva aérea, Nocedo extiende un sucesión de pequeñas áreas verdes, intercaladas entre las calles, que cruzan de manera longitudinal desde Padre Risco hasta Jovellanos. La imagen se refuerza ahora con el remate del proyecto, cofinanciado por la UE dentro del plan Edusi, con el que se ha renovado todos estos espacios de ocio y que se rematará con la peatonalización del tramo de vía que une Jaime Balmes con Vázquez de Mella, donde a partir de ahora se restringirá la circulación a los residentes y a los que acedan a los garajes.

Las obras cortan desde esta pasada semana Jovellanos. La calle, que ya cuenta con un tramo peatonal de origen, entre Alfonso VI y Jaime Balmés, pasará ahora a tener todo la plataforma a la misma altura. No habrá banda de aparcamiento a un lado, ni desnivel entre las aceras y la calzada, de acuerdo a la reurbanización del vial con la que se quiere escenificar la reserva de la movilidad para los peatones.

El calendario de los trabajos anuncia la finalización para antes de primavera, después de ejecutar la renovación de redes y la repavimentación de este tramo, en el que ya existe una hilera de castaños de indias que se conservarán. La intervención se completará con nuevo mobiliario urbano para favorecer las estancias dentro de un área que se encuadra dentro de un barrio envejecido, pero que a su vez sirve de conexión con la zona de influencia del campus universitario.

La entrega de la calle Jovellanos finiquitará el encargo del corredor verde. El proyecto suma una inversión de 628.955,30 euros para atender a todos los área verdes que se extienden desde este punto hasta la conexión casi con Las Ventas. Cada pequeño parque, ya ejecutados, cuenta con una finalidad, conforme al documento de los arquitectos: el que va de Padre Risco a Obispo Cuadrillero se destina a los más mayores; el siguiente, que llega hasta Sancho Ordóñez dispone juegos infantiles para los más pequeños; desde este punto hasta Marqués de Santa María del Villar se destina a los jóvenes y, seguido, se coloca un área deportiva. Como cierre queda la bolera, cuyo espacio se ha reformado tras quitar uno de los tres castros, y el pequeño triángulo hasta el encuentro con Nocedo en el que se abre una plazoleta.